La Creación de la Escuelita

Había una vez en un pequeño pueblo llamado Arcoiris, donde los niños no tenían una escuela a la cual asistir. Los niños del pueblo, cansados de no poder aprender, decidieron tomar cartas en el asunto y crear su propia escuelita.

"¡Vamos a construir nuestra propia escuela!" exclamó Martina, una niña valiente y decidida. "Sí, y pediremos ayuda a los adultos del pueblo para que nos ayuden" dijo Juan, un niño ingenioso.

Con mucha determinación, los niños del pueblo organizaron una reunión con los adultos para exponerles su idea. Al principio, los adultos dudaron de la posibilidad de construir una escuela con recursos limitados. Pero los niños demostraron tanta pasión y entusiasmo que los adultos se unieron a la causa.

Con la ayuda de la comunidad, los niños limpiaron un terreno y empezaron a construir su pequeña escuelita. Trabajaron juntos, aprendiendo de carpintería, pintura, y jardinería.

Poco a poco, la escuela fue tomando forma, con aulas coloridas y un hermoso jardín. Llegó el día de la inauguración, y todos los habitantes del pueblo se reunieron para celebrar la creación de la escuelita. Los niños estaban emocionados y orgullosos de su logro.

A partir de ese día, los niños del pueblo asistieron con alegría a su nueva escuela, donde aprendieron, jugaron y descubrieron un mundo de conocimiento. La creación de la escuelita demostró que con determinación, trabajo en equipo y el apoyo de la comunidad, los sueños se pueden hacer realidad.