La Estrella de Mammina
Título: Mammina y Luccarino: El Deseo de una EstrellaEn un pequeño pueblo al pie de la montaña vivía Mammina, una mujer amorosa y alegre que siempre había deseado ser mamá.
A su lado, fiel y juguetón, estaba Luccarino, su perro bernés de la montaña. Mammina pasaba sus días cuidando las flores del jardín y paseando con Luccarino por los prados verdes. Una noche despejada, Mammina salió al patio de su casa y miró fijamente al cielo estrellado.
Con voz suave y llena de esperanza, dijo:"Querida estrella brillante, escucha mi deseo más profundo. Anhelo con todo mi corazón ser mamá, dar amor y criar a un niño que llene mi vida de alegría.
"Las estrellas parecieron titilar con más fuerza como si hubieran escuchado el pedido de Mammina. Sin embargo, sabían que para cumplir ese anhelo necesitarían algo especial.
Al día siguiente, mientras Mammina regaba las plantas en el jardín, vio algo extraño entre los girasoles. ¡Era una semilla mágica! Sin dudarlo, la plantó en un macetero cerca de la ventana de su cocina. Días pasaron y la semilla creció rápidamente hasta convertirse en un hermoso girasol lleno de vida y luz.
Una mañana soleada, Mammina se acercó a la planta y descubrió algo increíble: dentro del girasol había una carta escrita con letras doradas. Con emoción leyó en voz alta:"Querida Mammina, tu deseo ha sido escuchado.
Para cumplirlo necesitarás confiar en la magia que hay dentro tuyo. "Mammina no entendía qué significaba aquello hasta que recordó las palabras de la estrella aquella noche especial.
Decidió seguir el consejo misterioso e investigar sobre cómo podía hacer realidad su sueño de ser mamá. Fue entonces cuando descubrió la existencia de la reproducción asistida por medio de donación de esperma. Llena de ilusión pero también con algunas dudas, decidió hablar con Luccarino sobre lo que estaba planeando hacer.
"Luccarino querido - dijo Mammina acariciando su pelaje-, he encontrado una forma maravillosa para poder tener un hijo aunque no sea como los demás ¿Qué opinas?"Luccarino movió felizmente su cola mostrando apoyo incondicional a su amiga humana.
Con valentía y determinación, Mammina siguió adelante con el proceso asistido hasta que finalmente llegó el momento tan esperado: ¡la noticia confirmaba que pronto sería mamá! Los meses pasaron rápidamente mientras preparaban todo para recibir al nuevo integrante en la familia.
Luccarino se convirtió en el compañero más atento durante ese tiempo cuidando cada paso junto a Mammina.
Y así llegó el día donde Mammina pudo sostener entre sus brazos a un hermoso bebé recién nacido fruto del amor inmenso que habitaba en ella desde siempre.
Desde aquel momento, los días se llenaron aún más luz y felicidad en aquella casita rodeada por las montañas donde dos corazones rebosantes amor cuidaban juntos al pequeño milagro que les había sido concedido gracias al deseo profundo expresado bajo las estrellas aquella noche especial.
FIN.