La Fiesta de la Nuez Gigante
Había una vez en un hermoso bosque, donde todos los animales estaban emocionados porque la primavera estaba por llegar. Los pájaros cantaban alegremente desde sus nidos, las mariposas revoloteaban entre las flores y los conejos saltaban de alegría.
Entre todos estos animales, había tres grandes amigos: Lucas el león, Martina la mariposa y Benjamín el búho. Siempre estaban juntos y se divertían mucho explorando el bosque.
Un día, mientras paseaban por el bosque, escucharon un ruido extraño que venía de un árbol cercano. Se acercaron con curiosidad y encontraron a Mateo el mono tratando de abrir una nuez gigante.
"¡Hola amigos! ¿Pueden ayudarme a abrir esta nuez? Es tan grande que no puedo hacerlo solo", dijo Mateo mientras hacía muecas de esfuerzo. Lucas, Martina y Benjamín se miraron entre sí y sin dudarlo comenzaron a trabajar en equipo para abrir la nuez. Lucas utilizó su fuerza para sostenerla mientras Martina buscaba una piedra afilada para romperla.
Finalmente, con mucho esfuerzo lograron abrirla y descubrieron que dentro había muchos frutos deliciosos. "¡Wow! ¡Qué sorpresa! Gracias chicos por ayudarme", exclamó Mateo emocionado.
Los cuatro amigos compartieron los frutos entre ellos y se sentaron bajo un árbol para disfrutarlos. Mientras comían, empezaron a hablar sobre lo emocionados que estaban por la llegada de la primavera.
Martina contó cómo le encantaba volar entre las flores y disfrutar de los rayos del sol, mientras que Benjamín mencionó lo mucho que le gustaba observar a los animales durante la noche cuando salía la luna. Lucas, por su parte, dijo que estaba ansioso por ver cómo todos los árboles se llenaban de hojas verdes nuevamente.
"¡Podemos hacer una fiesta para celebrar la llegada de la primavera!", exclamó Martina emocionada. Los demás animales del bosque escucharon sobre la fiesta y también se entusiasmaron. Todos querían festejar juntos el inicio de esta hermosa estación.
Prepararon invitaciones y las repartieron por todo el bosque. El día de la fiesta llegó y todos los animales se reunieron en un claro del bosque. Había música, juegos y comida para compartir.
Los pájaros cantaban sus melodías más alegres, las mariposas revoloteaban alrededor de las flores decorativas y los conejos saltaban de alegría al ritmo de la música. Lucas, Martina, Benjamín y Mateo sonreían mientras veían cómo todos disfrutaban juntos.
Se dieron cuenta de lo importante que era trabajar en equipo como habían hecho con la nuez gigante. Cada uno tenía habilidades únicas pero todas eran valiosas cuando trabajaban juntas.
Al finalizar la fiesta, Lucas tomó el micrófono y dirigiéndose a todos dijo: "Hoy hemos aprendido que cuando nos ayudamos mutuamente podemos lograr cosas increíbles. La primavera es una época para celebrar no solo porque trae flores y colores, sino también porque nos recuerda lo maravilloso que es compartir momentos especiales con nuestros amigos".
Todos los animales aplaudieron emocionados y agradecieron a Lucas por sus palabras. La fiesta de la primavera se convirtió en un evento anual donde todos los animales del bosque trabajaban juntos para hacerla posible.
Desde aquel día, Lucas, Martina, Benjamín y Mateo siguieron siendo grandes amigos y siempre estaban dispuestos a ayudarse mutuamente. Juntos demostraron que cuando se trabaja en equipo se pueden lograr cosas increíbles.
Y así, el bosque vivió muchas más primaveras llenas de alegría, amistad y festejos primaverales al ritmo del tereré.
FIN.