La Fuerza de la Amistad
Había una vez en un reino muy lejano dos princesas muy especiales: Blancanieves y Cenicienta.
Blancanieves vivía en un hermoso castillo rodeado de flores y animales, mientras que Cenicienta habitaba en una pequeña casa junto a su madrastra y hermanastras. Un día, las dos princesas se encontraron en el bosque mientras recogían flores. Se hicieron amigas al instante y decidieron compartir sus historias.
Blancanieves contó cómo había escapado de la malvada reina que quería hacerle daño, mientras que Cenicienta narró cómo soñaba con asistir al baile real pero su madrastra no se lo permitía. Blancanieves, con su dulzura infinita, le propuso a Cenicienta ayudarla a cumplir su sueño de ir al baile real.
Juntas buscaron entre los árboles del bosque y encontraron una hada madrina que les concedió un vestido deslumbrante para Cenicienta. "¡Oh, qué bonito!", exclamó Cenicienta emocionada. Con el vestido puesto, Cenicienta se transformó en la princesa más hermosa del reino.
Blancanieves también recibió un regalo especial: una manzana mágica que le daría fuerza ante cualquier adversidad. Así, las dos princesas partieron hacia el castillo para asistir al baile real.
Cuando llegaron, todos quedaron maravillados por la belleza de Cenicienta y la gracia de Blancanieves. Pero justo cuando estaban disfrutando de la fiesta, la malvada reina apareció disfrazada e intentó hacerle daño a Blancanieves con un hechizo.
Sin embargo, gracias a la manzana mágica, Blancanieves pudo protegerse y revertir el hechizo contra la reina. "¡No permitiré que hagas daño a nadie más!", exclamó valientemente Blancanieves. La reina huyó avergonzada mientras todos celebraban la valentía de las princesas.
Desde ese día, Blancanieves y Cenicienta se convirtieron en inseparables amigas y juntas demostraron que con amor, bondad y valentía se pueden superar cualquier obstáculo. Y colorín colorado este cuento ha terminado, pero la amistad entre Blancanieves y Cenicienta perdurará por siempre jamás.
¡Que vivan felices para siempre! Imagen:[Blancanieves sonriendo junto a Cenicientacon vestido brillante]Espero que esta historia haya sido inspiradora para los niños/as ¡y les haya gustado!
FIN.