La Gran Amistad de la Granja Delicioso

En una hermosa granja llamada Delicioso, vivían cuatro amigos muy especiales: una oveja llamada Lila, un conejo llamado Rocco, una vaca llamada Vera y una gallina llamada Clara. Cada uno de ellos tenía su propia personalidad y características, pero juntos formaban un equipo inseparable.

Un día, mientras Lila pastaba en el campo, escuchó un gran alboroto. Curiosa, se acercó y vio a Rocco intentando escapar de un pequeño arbusto.

"¡Ayuda, Lila!" - gritó Rocco, agitando sus patas. "¡Estoy atrapado!"

Lila rápidamente se acercó y le dijo: "No te preocupes, Rocco. Yo te ayudaré."

Con su suave lana, empujó el arbusto hasta que Rocco pudo mover sus patas y salir.

"¡Gracias, Lila! Eres la mejor amiga que podría tener," - dijo Rocco, llenándose de alegría.

Mientras tanto, Vera se estaba acercando con Clara. Al ver la escena, Vera dijo: "¡Qué bien que Lila ayudó a Rocco! Siempre hay que estar ahí para nuestros amigos."

"Claro, Vera," - respondió Clara. "Cuidar unos de otros es lo que hace que seamos una gran familia."

Pero pronto, la granja enfrentó un problema: el granero se había quedado sin alimento. Sin comida, los animales se verían en problemas. Vera se preocupó y dijo: "¿Qué vamos a hacer? Sin alimento, no estaremos bien en el invierno."

"Podemos buscar comida juntos," - sugirió Lila. "Si nos unimos, tal vez podamos encontrar suficiente para todos."

Rocco, lleno de entusiasmo, propuso: "Podemos dividirnos y explorar. Clara, tú toma el campo, yo iré al bosque, Lila y Vera pueden buscar en el río. Nos reunimos aquí al atardecer."

Todos estuvieron de acuerdo y se separaron en grupos. Rocco saltó ágilmente hacia el bosque, mientras Lila y Vera buscaban entre los arbustos cerca del río. Clara, por su parte, picoteaba en el campo buscando granos.

Al caer la tarde, todos regresaron a la reunión. Lila traía un montón de frescos pastos, Vera había encontrado unas hierbas jugosas, Rocco había conseguido algunas zanahorias del bosque, pero Clara no había tenido tanta suerte.

"Lo siento, amigos, no encontré nada interesante," - dijo Clara, un poco desanimada.

"No te preocupes, Clara. Juntos podemos hacer un gran banquete," - animó Vera. "Podemos compartir lo que tenemos, siempre se hace más con lo que compartimos."

Los amigos se pusieron a trabajar, cada uno aportando lo que había conseguido. Al final de la jornada, prepararon un festín con lo que encontraron: pasto fresco, zanahorias, hierbas deliciosas y granos que Rocco había traído de un lugar especial.

"¡Miren este festín!" - exclamó Rocco, saltando de alegría.

"Y todo gracias a que trabajamos juntos. Eso es la verdadera amistad," - dijo Lila, contemplando la mesa llena de comida.

Y así, en la Gran Granja Delicioso, aprendieron que la amistad es compartir y cuidar unos de otros, y que juntos, cualquier desafío se convierte en una aventura maravillosa.