La Gran Aventura de Torta, Coco y Mate
Era un día soleado en el bosque de los Amiguitos, donde vivía Torta, una deliciosa torta de chocolate con coco. Torta era conocida por ser la más dulce del bosque, y todos los animales la querían. También vivían allí Coco, un alegre loro colorido, y Mate, un sapo curioso que siempre estaba dispuesto a explorar.
Un día, mientras Torta disfrutaba del sol en una reposera, Coco aterrizó a su lado.
"¡Hola, Torta! ¿Te gustaría salir a buscar nuevas aventuras hoy?"
"¡Hola, Coco! Claro que sí, pero no tengo ni idea de adónde podríamos ir."
En ese momento, Mate también se unió a la charla.
"¡Yo sé de un lugar! He oído que hay una cueva mágica en la colina. Dicen que si entras, encontrarás tesoros increíbles."
"¡Eso suena genial!" exclamó Torta emocionada.
"¿Qué tipo de tesoros?" preguntó Coco, volando de un lado a otro.
"¡De todo! Brillantes cristales, monedas de oro y frutas exóticas que nunca hemos visto!" dijo Mate, llenando su voz de emoción.
Así que, sin pensarlo dos veces, el trío partió hacia la colina. El camino estaba lleno de flores coloridas y sonidos de ríos burbujeantes, y mientras caminaban, Torta compartía historias con sus amigos.
"Una vez viajé a un lugar donde las tortas podían volar. Era increíble; todos podían elegir su sabor favorito y volar al ritmo del viento."
"¡Qué divertido eso! Yo quiero volar como una torta", rió Coco, imaginando cómo sería.
"¿Y si yo pudiera saltar como vos, Mate?" añadió Torta, dándole una mirada traviesa.
Finalmente, llegaron a la cueva. La entrada era oscura y misteriosa.
"¿Estás segura de que querés entrar?" preguntó Mate con un hilo de duda.
"Sí, estoy lista. Juntos, podemos enfrentar cualquier cosa", respondió Torta con confianza.
Los tres amigos entraron, y lo primero que vieron fue un brillo deslumbrante.
"¡Miren esos cristales!" dijo Coco, volando hacia ellos.
"¡Pero cuidado! No sabemos si hay criaturas aquí dentro"
FIN.