La gran carrera de insectos
Había una vez en el bosque un grupo de insectos muy curiosos y valientes que decidieron organizar una gran carrera. La mariquita, la hormiga, el escarabajo, la mariposa y la libélula se prepararon con entusiasmo para el evento.
Todos estaban ansiosos por demostrar quién era el insecto más veloz y resistente del bosque. "¡Vamos, amigos! ¡Es hora de demostrar nuestro espíritu de superación!" exclamó la mariquita, animando a los demás.
La competencia inició con un gran estruendo de colores y sonidos. Los insectos corrieron y volaron a través del bosque, enfrentando obstáculos como ramas caídas, charcos de barro y pequeñas cuestas.
La mariquita demostró una velocidad impresionante, superando a sus amigos, pero la libélula le pisaba los talones con su vuelo ágil y elegante. La hormiga, a pesar de su pequeño tamaño, mostraba una resistencia asombrosa, seguida de cerca por el escarabajo, que avanzaba con determinación.
La mariposa, con sus alas delicadas, volaba con gracia a través del bosque, tratando de alcanzar a los demás. La carrera estaba reñida y emocionante, con giros inesperados y momentos de gran tensión. Finalmente, la línea de meta estaba a la vista y todos los insectos redoblaron sus esfuerzos.
La mariquita, la libélula, la hormiga, el escarabajo y la mariposa llegaron juntos, agotados pero llenos de alegría. "¡Fue una carrera increíble!" exclamó la mariquita, abrazando a sus amigos. "Sí, demostramos que, a pesar de nuestras diferencias, juntos podemos lograr grandes cosas", dijo la libélula.
Los insectos comprendieron que la verdadera victoria no estaba en llegar primero, sino en trabajar en equipo y valorar las habilidades de cada uno.
Desde ese día, el bosque resonó con risas y juegos, mientras los insectos aprendían a apreciar las cualidades únicas de cada uno y a trabajar juntos para alcanzar metas más allá de una simple carrera. Fue una lección de amistad, cooperación y superación que nunca olvidarían.
FIN.