La Gran Carrera de la Selva



En una selva muy lejana vivían varios animales que eran muy amigos: el mono Mono, la jirafa Jirafita, el elefante Elefantito y la cebra Cebrita. Ellos siempre jugaban juntos y se divertían mucho recorriendo la selva.

Un día, decidieron organizar una carrera para ver quién era el animal más rápido de todos. Estaban muy emocionados y listos para comenzar. "¡Listos, preparados, ya!", gritó Mono desde la línea de partida.

Los animales salieron corriendo lo más rápido que pudieron. La carrera estaba llena de obstáculos como troncos caídos, piedras grandes y charcos de barro. Debían saltar, esquivar y pasar por encima de cada uno de ellos.

Jirafita era la más alta y podía ver los obstáculos desde lejos, así que los esquivaba con facilidad con sus largas patas. Elefantito usaba su trompa para mover las piedras del camino y abrirse paso. Cebrita saltaba ágilmente sobre los charcos de barro sin ensuciarse.

Pero Mono tenía problemas para superar los obstáculos porque era un poco travieso y se entretenía jugando en vez de correr como los demás. Sin embargo, al ver a sus amigos tan concentrados en la carrera, decidió esforzarse al máximo.

Finalmente, después de sortear todos los obstáculos y desplazarse por diferentes terrenos de la selva, llegaron a la meta. Los cuatro animales estaban agotados pero felices por haber completado el desafiante recorrido juntos.

"¡Felicidades a todos! ¡Han sido unos corredores increíbles!", exclamó Mono entre risas. Desde ese día, los cuatro amigos aprendieron lo importante que era trabajar en equipo y apoyarse mutuamente para superar cualquier desafío que se les presentara en la vida.

Y así continuaron explorando juntos la selva, fortaleciendo su amistad mientras desarrollaban su psicomotricidad gruesa con juegos llenos de diversión y aventuras inolvidables.

FIN.

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