La gran meta de las hormigas futbolistas
En el hormiguero del bosque vivían un grupo de hormigas muy especiales: eran amigas y les encantaba jugar al fútbol. Todos los días se juntaban en un claro para practicar y divertirse. Entre ellas estaban Coni, la más rápida; Fer, la más habilidosa; y Panchi, la más valiente. Juntas formaban un equipo imparable.
Un día, mientras entrenaban, se dieron cuenta de que su campo de juego estaba en muy mal estado. Las piedras y ramas sueltas lo hacían peligroso y difícil de jugar. Decidieron que necesitaban una meta para poder practicar mejor y jugar partidos con otros equipos. Pero las hormigas no tenían ni idea de cómo construir una meta. Estaban desanimadas y pensaron que tendrían que renunciar a su sueño de competir.
Sin embargo, un grillo llamado Grilloco que siempre los observaba jugar se acercó a ellas y les ofreció su ayuda. Grilloco conocía a un viejo escarabajo carpintero llamado Don Carpintero, quien sabía cómo construir cosas maravillosas con madera.
Las hormigas futbolistas se emocionaron y, con la ayuda de Grilloco, fueron en búsqueda de Don Carpintero. Después de mucho buscar, lo encontraron en lo más profundo del bosque. Les explicaron su problema y Don Carpintero, con mucha amabilidad, accedió a ayudarlas.
Durante días, las hormigas trabajaron junto a Don Carpintero, aprendiendo cómo cortar la madera, clavar clavos y unir piezas. Fue un trabajo arduo y desafiante, pero no se rindieron.
Finalmente, con esfuerzo y trabajo en equipo, lograron construir una hermosa meta de madera. Estaban tan emocionadas y felices que organizaron un gran partido de fútbol para estrenarla. Invitaron a todos los insectos del bosque y, con la ayuda de su nueva meta, jugaron un partido increíble.
Las hormigas futbolistas aprendieron que con esfuerzo, perseverancia y la ayuda de amigos, pueden lograr cualquier cosa que se propongan. A partir de ese día, su hormiguero se convirtió en el centro deportivo del bosque, y las hormigas futbolistas se convirtieron en un ejemplo de trabajo en equipo y superación para todos los insectos del lugar.
FIN.