La granja de Renata

En una hermosa granja vivía Renata, una niña curiosa y amante de los animales. Todos los días, Renata cuidaba a las gallinas, alimentaba a los cerdos, cepillaba a los caballos y jugaba con los cachorros.

Un día, una terrible tormenta azotó la granja y derribó el viejo granero donde vivían los conejos. Renata, con lágrimas en los ojos, decidió tomar acción. - ¡No se preocupen, conejitos! Voy a construirles un nuevo hogar, prometió Renata mientras tomaba martillo y clavos.

Con amor y esfuerzo, Renata construyó un increíble refugio para los conejos. Impresionados por su valentía, los demás animales decidieron ayudar. - ¡Yo recolectaré madera! - dijo el caballo.

- ¡Y yo llevaré paja para hacer camas suaves! - agregó el cerdo. Con trabajo en equipo, la granja se convirtió en un lugar aún más hermoso y acogedor. Renata aprendió que con determinación y la ayuda de sus amigos, podía superar cualquier desafío.

La granja siempre estaría llena de amor y alegría, gracias a la valentía de Renata y la solidaridad de todos los animales.