La heroína secreta de Francisca


Francisca era una niña como cualquier otra, hasta que un día descubrió algo increíble: tenía poderes mágicos. Pero lo más sorprendente de todo es que estos poderes sólo funcionaban cuando nadie la veía.

Al principio, Francisca no sabía muy bien qué hacer con su habilidad secreta. Probó a levitar algunas cosas pequeñas en su habitación, pero se aburrió pronto. Entonces decidió salir al jardín para ver si podía hacer algo más emocionante.

Allí encontró a su perro Chispas jugando con una pelota roja y decidió probar sus poderes en él. Cuando nadie miraba, Francisca extendió su mano hacia la pelota y ¡pum! desapareció por completo. Chispas estaba desconcertado, buscando la pelota por todas partes sin éxito.

Francisca se rió sola mientras observaba desde detrás de un árbol cómo el perro seguía buscando sin entender nada. Pero pronto se dio cuenta de que esto no era divertido.

Había hecho desaparecer algo importante para Chispas y eso no estaba bien. Decidió usar sus poderes para encontrar la pelota y devolverla a su lugar original antes de que alguien más notara que había desaparecido.

Después de ese incidente, Francisca comenzó a ser más cuidadosa con sus poderes mágicos. Aprendió a controlarlos mejor y a usarlos sólo cuando realmente era necesario o divertido para ella misma o los demás.

Un día, mientras jugaba con sus amigos del barrio en el parque cerca de su casa, vio a un niño llorando porque había perdido su globo favorito en un árbol muy alto. Francisca sabía que podía ayudar, pero también sabía que no podía hacerlo sin que nadie la viera.

Así que se escondió detrás de un arbusto y extendió su mano hacia el globo. Lo hizo subir lentamente hasta alcanzar el niño, quien quedó sorprendido y feliz al recibirlo de vuelta.

Desde ese día, Francisca supo que sus poderes mágicos eran algo especial y útil para los demás. Aprendió a usarlos con responsabilidad y a ser una verdadera heroína en secreto. Y aunque nunca descubrieron sus poderes mágicos, todos sus amigos del barrio siempre la recordaron como alguien muy especial y valiente.

Dirección del Cuentito copiada!