La historia de los reyes pacíficos
Había una vez, en un pequeño pueblo llamado Villa Paz, donde todos los habitantes vivían felices y en armonía. Pero un día, llegaron noticias terribles de que una guerra estaba a punto de estallar.
Los adultos del pueblo se preocuparon mucho por lo que podría pasar si la guerra llegaba a su hogar. Los niños también escucharon las noticias y se asustaron mucho, no entendían por qué tenía que haber tanta violencia en el mundo.
Un día, mientras los niños jugaban en el parque del pueblo, apareció un anciano sabio llamado Don Fulgencio. Los niños lo rodearon para escuchar sus historias y consejos.
Don Fulgencio les dijo: "Mis queridos niños, sé que están asustados por la guerra que se avecina. Pero quiero contarles una historia inspiradora". "¡Sí, sí! ¡Cuéntanos!", dijeron los niños emocionados.
Don Fulgencio comenzó a contarles sobre dos reinos vecinos que habían estado luchando durante años por el control de un territorio fértil. La guerra había dejado a ambos reinos devastados y empobrecidos. Un día, los dos reyes decidieron reunirse para buscar una solución pacífica al conflicto.
Después de muchas conversaciones y negociaciones difíciles, finalmente llegaron a un acuerdo justo para ambas partes. Los dos reyes firmaron un tratado de paz y trabajaron juntos para reconstruir sus países después de la guerra. Gracias a su cooperación y compromiso con la paz, ambos reinos prosperaron más allá de lo imaginado.
"¿Y qué aprendieron los reyes?", preguntó uno de los niños. Don Fulgencio respondió: "Aprendieron que la guerra no es la única solución a los conflictos.
Que el diálogo, la comprensión y el compromiso son las claves para resolver problemas de manera pacífica". Los niños escucharon atentamente y se dieron cuenta de lo importante que era trabajar juntos y tratar de entender a los demás en lugar de luchar.
Decidieron hacer una promesa entre ellos, que nunca permitirían que su pueblo fuera consumido por la violencia. "¡Prometemos ser pacíficos!", gritaron todos al unísono.
Y así fue como los niños de Villa Paz aprendieron una valiosa lección sobre la importancia de la paz y el diálogo en tiempos difíciles. Y aunque la guerra nunca llegó a su hogar, siempre recordarían esa promesa y trabajarían juntos para mantener viva la paz en su pequeño pueblo.
FIN.