La historia de Tom y sus amigos
En una hermosa selva vivía Tom, un capibara dulce y tierno, junto a su mamá capibara, que siempre cocinaba deliciosos pasteles para él y sus amigos. Entre sus amigos estaban Ruperto, un conejo muy inteligente y astuto; Olivia, una colibrí tan hermosa como el cielo azul; y Bartolito, un pequeño elefante que solía decir 'no puedo' antes de intentar cualquier cosa.
Un día, Tom y sus amigos estaban jugando en la selva cuando encontraron a Luna, una tortuga que estaba atrapada en el fango. Sin dudarlo, Tom y sus amigos se acercaron para ayudarla. - '¡Tranquila, Luna! ¡Vamos a sacarte de ahí!' dijo Tom con determinación. - 'Sí, juntos podemos lograrlo', añadió Ruperto con confianza. - 'Yo puedo buscar algo para ayudar a desatascarla', propuso Olivia, mientras revoloteaba alrededor. - 'Y yo puedo empujar desde este lado', dijo Bartolito, decidido a hacer su parte.
Trabajando juntos, lograron liberar a Luna. La tortuga, agradecida, les contó sobre un lago mágico donde todos los animales de la selva podrían refrescarse y divertirse juntos. Sin embargo, para llegar al lago, debían cruzar un puente cuyas tablas estaban sueltas. Al acercarse al puente, Bartolito exclamó: 'No puedo cruzar, ¡miren este puente!'
Viendo la preocupación en el rostro de Bartolito, Tom se acercó y le dijo: - 'Amigo, juntos encontraremos la manera de cruzar. Podemos pensar en una solución, ¿no crees?' Con las habilidades astutas de Ruperto, la agilidad de Olivia, la fuerza de Tom y la determinación de Bartolito, lograron reparar el puente y llegar al lago mágico.
Después de un día lleno de diversión, regresaron a la casa de Tom, donde la mamá capibara los esperaba con sus deliciosos pasteles. Satisfechos y felices, los amigos se dieron cuenta de que trabajando juntos y mostrando empatía, podían superar cualquier desafío. Desde entonces, Bartolito cambió su 'no puedo' por un 'lo intentaré', y todos aprendieron la importancia de ayudarse mutuamente y ponerse en el lugar del otro. Juntos, comprendieron el valor de la empatía y la fuerza que surge al unir esfuerzos.
FIN.