La historia del toro Barroso
En un hermoso campo verde, vivía un toro gruñón llamado Barroso. Todos en la granja temían acercarse a él, pues sus respingos y bufidos los mantenían alejados.
Pero lo que nadie sabía es que Barroso era gruñón porque en su interior guardaba un gran dolor. Se sentía diferente a los demás animales y eso lo entristecía. Un día, llegó a la granja una nueva vaquita llamada Lola.
Ella era tierna y dulce, y a pesar de los gruñidos de Barroso, se acercaba a él para intentar entablar una amistad. Al principio, Barroso se enojaba más, pero luego, con el tiempo, comenzó a apreciar la valentía y amabilidad de Lola.
Juntos, vivieron muchas aventuras, descubrieron nuevos lugares en la granja y se hicieron inseparables. Con el tiempo, Barroso demostró ser un gran amigo, protector y confidente para todos los animales, enseñando que las apariencias pueden engañar y que la verdadera amistad no conoce barreras.
Y así, el toro gruñón se convirtió en el toro más querido de la granja, gracias al amor y la paciencia de su amiga Lola.
FIN.