La huella del bosque

Lorenzo y su papá estaban muy emocionados por pasar un fin de semana en el bosque con su casilla rodante. Habían preparado todo lo necesario para la aventura: comida, agua, abrigo y hasta una linterna para las noches frías.

Después de conducir durante varias horas, finalmente llegaron al bosque y encontraron un lugar perfecto para acampar. Armaron la casilla rodante rápidamente y se dispusieron a explorar los alrededores. Mientras caminaban por el bosque, Lorenzo notó algo extraño.

"Papá, ¿qué es eso?"- preguntó señalando hacia una gigantesca huella en el suelo. "Es una huella de dinosaurio"- respondió su papá, sorprendido. "¿Dinosaurios? ¿En serio?"- preguntó Lorenzo asombrado.

"Sí hijo, hace millones de años los dinosaurios vivían en esta zona"- explicó su papá mientras seguían caminando cautelosamente por el bosque. De repente escucharon un fuerte rugido que venía desde atrás de los árboles. Era el rugido característico del Tiranosaurio Rex.

Aterrados, Lorenzo y su padre corrieron hacia la casilla rodante para refugiarse allí. "¡Papá! ¡Qué hacemos ahora? ¡Hay dinosaurios!"- exclamó Lorenzo con miedo mientras cerraba todas las ventanas de la casilla rodante.

Su padre intentaba mantener la calma mientras buscaba información sobre los dinosaurios en internet. "Lorenzo, tranquilo. Los dinosaurios ya no existen en nuestro tiempo actual"- dijo tratando de tranquilizar a su hijo. "¿Pero entonces qué fue ese rugido que escuchamos?"- preguntó Lorenzo incrédulo.

"Es posible que haya sido un animal parecido a un dinosaurio, pero no te preocupes. Vamos a estar bien"- respondió su papá con una sonrisa tranquilizadora.

Lorenzo empezó a sentirse mejor al escuchar las palabras de su padre y juntos decidieron buscar una solución para salir del bosque lo más pronto posible. Al día siguiente, mientras caminaban por el bosque en busca de ayuda, encontraron huellas frescas de un animal grande.

Lorenzo estaba asustado, pero su padre le explicó que podía ser una vaca o algún otro animal inofensivo. Finalmente lograron encontrar la carretera principal y pedir ayuda.

Mientras esperaban por la asistencia, Lorenzo se dio cuenta de algo importante: aunque habían pasado momentos difíciles en el bosque, había aprendido mucho sobre los dinosaurios y cómo sobrevivir en situaciones extremas junto con su padre. La aventura había sido emocionante e inolvidable.

Y aunque nunca supieron qué tipo de animal hizo aquel rugido espeluznante en el bosque, Lorenzo sabía que siempre tendría la valentía para enfrentar cualquier situación difícil gracias a los consejos de su papá.