La increíble aventura de la iguana Ivi
Había una vez, en un bosque brillante y bonito, una iguana llamada Ivi. Ivi era muy curiosa y le encantaba explorar. Un día, decidió salir de su casa porque quería conocer nuevos amigos.
- ¡Hoy es un gran día! - dijo Ivi con una gran sonrisa. - ¡Voy a descubrir lo que hay más allá del río!
Ivi cruzó el río saltando de piedra en piedra y llegó a un claro lleno de flores.
- ¡Mira cuántas flores! - exclamó sorprendida.
De repente, escuchó un sonido. Era un pajarito que estaba atrapado en una rama.
- ¡Hola, pajarito! - saludó Ivi. - ¿Te puedo ayudar?
- ¡Sí, por favor! - dijo el pajarito. - Estoy enredado.
Ivi pensó. Usó su larga cola para mover la rama y liberar al pajarito.
- ¡Gracias, Ivi! - chirrió el pajarito, muy contento. - Eres muy valiente.
- ¡Me alegra ayudarte! - respondió Ivi. - ¿Te gustaría jugar conmigo?
- ¡Sí! - contestó el pajarito. - Vamos a jugar a las escondidas.
Ivi e Ivi comenzaron a jugar y a correr por el claro. Se escondían detrás de las flores y se reían mucho.
Después de un rato, Ivi dijo:
- ¡Esto es increíble! ¡Es muy divertido jugar contigo!
- ¡Sí! - dijo el pajarito - Me gusta mucho jugar con una iguana como tú.
Y así, Ivi e Ivi siguieron explorando. En el camino encontraron un increíble árbol lleno de frutas.
- ¡Mira todas esas frutas! - dijo Ivi emocionada. - ¡Quiero probarlas!
El pajarito voló hacia el árbol y comenzó a picotear las frutas.
- Ven, Ivi, ¡son riquísimas! - gritó el pajarito mientras comía.
Ivi también probó algunas frutas y le encantaron.
Después de un día lleno de aventuras, el sol comenzó a bajar en el horizonte.
- Ha sido un día maravilloso, Ivi - dijo el pajarito con una sonrisa.
- Sí, fue increíble - respondió Ivi. - ¡Tengo un nuevo amigo!
Y así, Ivi regresó a casa, feliz y llena de recuerdos. Desde ese día, la iguana Ivi supo que con una sonrisa y un poco de valentía, podía vivir increíbles aventuras. Y siempre, siempre, recuerda la importancia de la vocal 'i' en su nombre: Ivi.
- ¡Adiós, amigo! - dijo Ivi al pajarito mientras se despedían.
- ¡Hasta pronto, Ivi! - contestó el pajarito, volando hacia el cielo.
Y así, niños, aprendemos que la letra 'i' es importante, así como nuestra amistad. ¡Hasta el próximo cuento!
FIN.