La isla de la valentía

Yailen era una niña muy alegre y curiosa que vivía en una pequeña isla en el sur del país.

Un día, mientras paseaba por el mercado de la ciudad, se encontró con Yerobe, un niño tímido y amable que estaba buscando un regalo para su hermana. "¡Hola Yailen! ¿Qué estás haciendo por aquí?" -preguntó Yerobe con una sonrisa. "Hola Yerobe, solo dando vueltas y viendo qué hay de interesante por aquí.

¿Necesitas ayuda con algo?" -respondió Yailen con entusiasmo. Y así fue como los dos niños comenzaron a hablar y se dieron cuenta de que tenían mucho en común.

Decidieron ir juntos de compras por el mercado, probando frutas exóticas y buscando regalos para sus familias. Después de un rato, llegaron a una tienda de ropa de playa y se les ocurrió la genial idea de comprar bañadores para disfrutar del sol y la arena en la playa cercana.

Yerobe estaba emocionado pero un poco nervioso porque nunca había aprendido a nadar. "¿Sabes nadar, Yailen? Yo no sé... " -dijo Yerobe tímidamente. "¡No te preocupes, Yerobe! Yo te enseñaré. " -respondió Yailen con seguridad. Así que compraron los bañadores y corrieron hacia la playa.

El sol brillaba en lo alto y las olas rompían suavemente en la orilla. Yailen le dio a Yerobe algunas instrucciones básicas sobre cómo flotar y moverse en el agua.

Pero cuando Yerobe se aventuró un poco más lejos, una ola más grande lo tomó por sorpresa y empezó a hundirse. Sin pensarlo dos veces, Yailen se lanzó al agua rápidamente y lo agarró justo a tiempo antes de que fuera demasiado tarde.

"¡Gracias, gracias!" -exclamó Yerobe tosiendo agua mientras recuperaba el aliento. "De nada, amigo. Recuerda siempre tener cuidado en el agua y si necesitas ayuda ¡no dudes en pedirla!" -le dijo cariñosamente Yailen.

Desde ese día, la amistad entre Yailen y yerobe creció aún más fuerte. Pasaban horas jugando en la playa, explorando cuevas misteriosas y aprendiendo nuevas cosas juntos. Y aunque cada uno tenía sus propios miedos e inseguridades, se apoyaban mutuamente para superarlos.

Así demostraron que con valentía, amistad y solidaridad no hay obstáculo imposible de superar.