La lección de campo



Había una vez una niña llamada Paz, que vivía en la ciudad rodeada de edificios y ruido. Un día, su abuelo le propuso ir al campo a pasar unos días y ella aceptó emocionada.

Cuando llegaron al campo, Paz se sorprendió con los amplios espacios verdes, los animales y el aire fresco. "¡Qué hermosura!", exclamó la niña.

Mientras caminaban por el campo, el abuelo le explicaba todo lo que veían: "Esa es una vaca, da leche para hacer queso; esos son caballos, sirven para montar y pasear; aquí hay un arroyo donde viven peces". Paz estaba fascinada con todo lo que aprendía. Pero un día mientras jugaba cerca del arroyo escuchó un ruido extraño.

Se acercó para investigar y encontró a un pequeño patito atrapado entre las ramas de un árbol caído. "Abuelo, ven rápido! Hay un patito atrapado aquí!"- gritó Paz.

El abuelo se acercó corriendo y vio a la criaturita asustada tratando de liberarse sin éxito. "Tranquila Paz -le dijo-, vamos a ayudarlo juntos". Con mucho cuidado lograron sacar al patito del atolladero.

"¡Gracias! -dijo Paz sonriente- ¡Me encanta ayudar!"Esa noche mientras cenaban junto al fuego del hogar, el abuelo habló con su nieta sobre lo importante que es ser solidario con los demás seres vivos. "Todos podemos ayudar en algo", dijo el abuelo. "A veces, solo necesitamos prestar atención a nuestro alrededor y estar dispuestos a actuar".

Paz asintió en silencio, pensando en cuántas cosas había aprendido desde que llegó al campo. Los días pasaron rápidamente y llegó la hora de volver a casa.

Paz estaba triste por tener que dejar el campo pero sabía que había aprendido mucho durante su estadía. "¡Volveremos pronto! -le prometió su abuelo- ¡Y juntos seguiremos descubriendo las maravillas de la naturaleza!"Desde aquel día, Paz nunca dejó de ayudar a los demás seres vivos.

Se convirtió en una defensora del medio ambiente y siempre estaba dispuesta a hacer lo necesario para protegerlo.

Y así, gracias a su experiencia en el campo junto a su abuelo, Paz se convirtió en una niña más consciente y comprometida con el mundo que la rodeaba.

FIN.

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