La lección de la limpieza en la Escuela Primaria Solcito Brillante



En la Escuela Primaria "Solcito Brillante" todo era alegría y diversión. Los niños corrían por el patio, reían a carcajadas y aprendían cosas nuevas cada día de la maestra Clara, una joven entusiasta y dedicada.

Pero un problema comenzó a preocupar a la maestra Clara: algunos de sus alumnos no estaban prestando atención a su higiene personal. Sus manos estaban sucias, sus uniformes arrugados y desprolijos, y muchos olían mal.

La maestra sabía que debía hacer algo al respecto.

Un día, después de la clase, la maestra Clara reunió a todos los niños en el aula y les dijo con voz firme pero amable:"Queridos alumnos, he notado que algunos de ustedes están teniendo problemas con su higiene personal. Es importante lavarse las manos antes de comer, mantener limpios nuestros uniformes y bañarnos regularmente para estar sanos y felices. ¿Qué podemos hacer para mejorar juntos?". Los niños se miraron entre sí avergonzados.

Sabían que la maestra tenía razón, pero les daba vergüenza admitirlo. Finalmente, Martín levantó tímidamente la mano y dijo:"Yo muchas veces me olvido de lavarme las manos antes de comer porque juego mucho en el recreo".

La maestra sonrió comprensivamente y le dijo:"Martín, es normal que te diviertas en el recreo, pero también es importante cuidar nuestra salud. ¿Qué tal si nos organizamos para recordarnos mutuamente lavarnos las manos antes de entrar al comedor?".

Los demás niños asintieron emocionados con la idea. Todos juntos crearon un cartel colorido que decía: "¡Manos limpias para una comida feliz!" e hicieron una lista con los nombres de cada uno para recordarse unos a otros lavarse las manos.

Poco a poco, gracias al trabajo en equipo y la empatía entre los alumnos, todos empezaron a prestar más atención a su higiene personal.

Los uniformes lucían impecables, las manos estaban siempre limpias y frescas fragancias comenzaron a inundar el salón. La maestra Clara estaba orgullosa de sus alumnos. Habían demostrado que juntos podían superar cualquier desafío.

Y así, la Escuela Primaria "Solcito Brillante" se convirtió en un lugar donde no solo se aprendían matemáticas o lengua, sino también valores fundamentales como el compañerismo y el cuidado propio y del prójimo. Y colorín colorado este cuento sobre higiene personal ha terminado ¡Conviértete tú también en un héroe de la limpieza!

FIN.

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