La lección de Lila en EcoDivisión

En un lejano bosque llamado EcoDivisión, vivían diferentes criaturas mágicas y seres fantásticos que se encargaban de cuidar y proteger su hogar. Entre ellos se encontraba Lila, una hada curiosa y valiente que siempre estaba en busca de aventuras.

Un día, mientras volaba por el bosque, Lila escuchó unos extraños ruidos que venían del otro lado del río.

Decidió acercarse para investigar y descubrió a los Bichitos Divisores, unas pequeñas criaturas traviesas que estaban causando desorden en el ecosistema. "¿Qué están haciendo ustedes aquí?" preguntó Lila con voz firme. "Estamos dividiendo todo a nuestro paso", respondieron los Bichitos Divisores con malicia.

Lila observó con tristeza cómo estos seres dividían las plantas, los árboles y el agua sin ningún cuidado por la naturaleza. Entonces tuvo una idea brillante: enseñarles a hacer divisiones de manera adecuada para que comprendieran la importancia de mantener el equilibrio en el bosque.

Con paciencia, Lila reunió a los Bichitos Divisores alrededor de un árbol centenario y les explicó:"La división es una operación matemática que nos ayuda a repartir cantidades de forma equitativa. Si dividimos los recursos naturales de manera justa, todos podremos vivir en armonía.

"Los Bichitos Divisores prestaron atención a las palabras de Lila y comenzaron a practicar divisiones sencillas entre ellos. Pronto entendieron que al repartir adecuadamente los alimentos y el agua, no solo ayudaban al ecosistema sino también aseguraban su propia supervivencia.

Animados por su nueva habilidad matemática, los Bichitos Divisores se convirtieron en guardianes responsables del bosque EcoDivisión. A partir de ese día, trabajaron junto a Lila y las demás criaturas para proteger la flora y fauna local, promoviendo un ambiente saludable para todos.

El bosque volvió a florecer con más vida que nunca antes gracias al esfuerzo conjunto de sus habitantes.

Y cada vez que algún problema surgía, Lila recordaba a sus amigos la importancia de la división equitativa como clave fundamental para conservar la belleza natural del lugar. Así concluyó esta maravillosa historia donde las divisiones no solo fueron aprendidas por los personajes sino también aplicadas para preservar la armonía en el ecosistema.

Y colorín colorado este cuento educativo ha terminado ¡Hasta pronto!