La lección en el bosque


Un día soleado, Luca y Leandro decidieron aventurarse en el bosque para explorar. Llevaban consigo una mochila con algunas golosinas y agua para pasar el día. Garry, su gato, se unió a ellos.

Mientras caminaban por el bosque, escucharon unos ruidos extraños que venían de detrás de los árboles. Se acercaron sigilosamente y vieron a Grizy, una pequeña ardilla roja, corriendo junto a un grupo de lemmings.

- ¡Mira Luca! - dijo emocionado Leandro - Son Grizy y los lemmings. Siempre quise verlos en persona. - Sí - respondió Luca asombrado - Nunca pensé que encontraríamos animales tan interesantes en nuestro propio bosque. Garry también estaba emocionado por la nueva experiencia.

Los tres hermanos decidieron seguir a los animales para ver adónde iban. Después de caminar durante un rato, llegaron a una pequeña colina donde Grizy y los lemmings se detuvieron. Desde allí podían ver todo el bosque y las montañas cercanas.

- ¿Por qué están aquí? - preguntó curioso Leandro. De repente, escucharon un fuerte rugido proveniente del otro lado del bosque. Era un oso pardo gigante que se había despertado de su siesta y estaba buscando comida.

Grizy les explicó que siempre venía al mismo lugar con sus amigos lemmings para evitar peligros como ese oso hambriento. Además, aprovechaban este lugar para disfrutar la vista mientras comían algunas nueces deliciosas que crecían en los árboles cercanos.

- ¡Qué idea tan inteligente! - dijo Luca admirado - Nunca pensé que estos pequeños animales podrían enseñarnos tanto. De repente, se dieron cuenta de que el oso se estaba acercando peligrosamente a ellos.

Garry, el gato, saltó al rescate y logró distraer al oso mientras Grizy y los lemmings escapaban corriendo hacia la seguridad de su guarida. - ¡Bien hecho Garry! - dijeron Luca y Leandro emocionados mientras abrazaban a su valiente gato.

Después de esta aventura emocionante, los hermanos aprendieron la importancia de trabajar juntos para enfrentar situaciones difíciles. También aprendieron cómo los animales pueden enseñarnos cosas importantes sobre la vida y cómo podemos ayudarlos a proteger sus hogares naturales.

Desde ese día en adelante, Luca y Leandro visitaron regularmente a Grizy y los lemmings para disfrutar la vista del bosque desde esa colina segura. Y siempre recordaron la valentía de su querido amigo felino, Garry.

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