La lección en el jardín
Era un hermoso día de sol en el jardín de la casa de Valentina. La pequeña y sus amigos Vicente, Sophia, Dante y Martín estaban muy emocionados porque habían planeado una tarde llena de aventuras y diversión.
Pero las señoritas Lore y Dani, quienes cuidaban a los niños mientras sus padres trabajaban, les advirtieron que debían comportarse bien. "Recuerden chicos, no quiero ver travesuras ni nada por el estilo", dijo la señorita Lore con voz firme.
"Pero si nos portamos bien todo el tiempo es aburrido", respondió Dante con una sonrisa traviesa. "No necesitan hacer travesuras para divertirse", intervino la señorita Dani. "Podemos jugar juegos al aire libre o leer cuentos".
Los niños aceptaron las sugerencias de las señoritas pero no pudieron evitar sentirse un poco decepcionados. Sin embargo, decidieron seguir adelante con su plan original: construir una casita en el árbol del jardín.
Valentina tomó el liderazgo del grupo y empezaron a recolectar ramas secas y hojas para armar la casita. Mientras tanto, las señoritas Lore y Dani se sentaron a leerles cuentos bajo la sombra de un árbol cercano.
Pero cuando los niños estaban subiendo al árbol para colocar las ramas más altas, Martín perdió el equilibrio y cayó al suelo lastimándose el brazo. Las señoritas corrieron hacia él para ayudarlo mientras los demás niños se asustaron mucho al verlo herido.
Fue entonces cuando comprendieron lo importante que era escuchar a las personas mayores y no hacer travesuras peligrosas. Valentina, Vicente, Sophia y Dante se disculparon con las señoritas por su comportamiento anterior y prometieron portarse bien en adelante.
Mientras tanto, Martín fue llevado al hospital para que le atendieran la herida. A partir de ese momento, los niños aprendieron a divertirse de manera responsable y segura. Las señoritas Lore y Dani les enseñaron juegos educativos y actividades creativas que disfrutaron mucho más que las travesuras peligrosas.
Al final del día, todos se sintieron felices por haber pasado un tiempo maravilloso juntos sin tener que arriesgar sus vidas.
Los niños aprendieron una importante lección sobre la importancia de escuchar a los adultos responsables y cuidar de sí mismos mientras se divierten.
FIN.