La lechuza profesora

Había una vez en un frondoso bosque, una lechuza sabia y amorosa llamada Doña Lechucita. Ella se dedicaba a enseñar a los pajaritos a volar y a prepararlos para la vida en el bosque.

Un día, llegó al bosque un pajarito llamado Pepito, que no sabía volar y se sentía muy triste por no poder jugar con los demás pajaritos. Doña Lechucita se acercó a Pepito y le dijo: 'No te preocupes, yo te enseñaré a volar.

Solo necesitas tener confianza en ti mismo y seguir mis consejos.' - '¿En serio? ¿Me enseñarás?' preguntó Pepito emocionado. - 'Claro que sí, Pepito. Una vez que aprendas a volar, podrás descubrir todo lo maravilloso que hay en el bosque.

Pero recuerda, la paciencia y la perseverancia son clave', explicó la lechuza. Pepito se comprometió a seguir las enseñanzas de Doña Lechucita. Con el paso de los días, Pepito practicaba incansablemente siguiendo los consejos de la lechuza.

Hasta que por fin, un soleado día, Pepito logró elevarse por los aires. Estaba tan emocionado que empezó a volar de un lado a otro, sintiéndose libre y feliz. Doña Lechucita lo observaba con orgullo y alegría.

Desde entonces, Pepito volaba junto a sus amigos, explorando el bosque y disfrutando de la naturaleza. Doña Lechucita continuó enseñando a muchos otros pajaritos, recordándoles siempre que la perseverancia y la confianza en uno mismo son fundamentales para alcanzar sus sueños.

Y juntos, crearon un bosque lleno de pajaritos felices y seguros de sí mismos.