La lluvia de la amistad



En un día de lluvia en la ciudad, un hombre llamado Juan caminaba por las calles mojadas. Llevaba su paraguas roto y su ropa empapada. A pesar del mal tiempo, Juan mantenía una sonrisa en su rostro.

Mientras caminaba, vio a un niño sentado debajo de un toldo que se resguardaba de la lluvia. El pequeño estaba triste y solitario. - Hola, ¿cómo estás? - preguntó Juan con amabilidad.

- Estoy bien - respondió el niño con timidez. Juan notó que el niño no tenía paraguas y estaba empapado hasta los huesos. - ¿Por qué no vienes conmigo? Te llevaré a casa para que te seques - dijo Juan mientras extendía su mano al niño.

El niño aceptó la oferta de Juan y juntos comenzaron a caminar hacia su hogar.

Durante el camino, el niño le contó a Juan sobre sus problemas en la escuela y cómo se había sentido solo desde que sus padres habían muerto en un accidente automovilístico. Juan escuchó atentamente las historias del niño y le dijo:- No estás solo, siempre hay alguien ahí afuera dispuesto a ayudarte. Nunca tengas miedo de pedir ayuda cuando lo necesites.

Finalmente llegaron al hogar del pequeño, donde su abuela los recibió con una cálida bienvenida. La abuela estaba sorprendida por la generosidad de Juan y le ofreció quedarse para tomar una taza caliente de té.

Mientras bebían té caliente, Juan les contó historias inspiradoras sobre cómo él mismo había superado momentos difíciles en su vida. Les habló de la importancia de ser amable y generoso con los demás.

Después de pasar un tiempo agradable juntos, Juan se despidió del niño y su abuela. El pequeño lo abrazó fuertemente y le agradeció por su ayuda. A partir de ese día, el niño comenzó a aplicar las enseñanzas que Juan le había dado.

Se hizo amigo de otros niños en la escuela y siempre ofrecía su ayuda cuando alguien estaba triste o necesitaba apoyo. Juan también aprendió una valiosa lección: nunca subestimes el poder de una buena acción.

A veces todo lo que se necesita para cambiar la vida de alguien es un simple acto de bondad.

FIN.

Dirección del Cuentito copiada!