La Ludoteca de Julieta
Julieta era una niña curiosa y creativa que vivía en un pequeño pueblo. Un día, descubrió que la ludoteca del pueblo estaba en mal estado y decidió hacer algo al respecto.
Armada con su determinación, Julieta buscó la ayuda de sus amigos y vecinos para arreglar la ludoteca. Juntos, limpiaron, pintaron y repararon cada rincón del lugar, convirtiéndolo en un espacio acogedor y lleno de colores.
Cuando la ludoteca estuvo lista, Julieta y su abuelita organizaron un evento para la comunidad. Niños y niñas de todas partes llegaron emocionados a conocer el nuevo lugar. La ludoteca se llenó de risas, juegos y mucha diversión.
Julieta se convirtió en la encargada de la ludoteca, donde cada tarde leía cuentos a los más pequeños, organizaba talleres de manualidades y ayudaba a los niños con sus tareas escolares. La ludoteca se convirtió en el corazón del pueblo, un lugar donde la imaginación volaba alto y la amistad se fortalecía día a día.
Gracias al esfuerzo y la creatividad de Julieta, la ludoteca se convirtió en un espacio inspirador para todos los niños del pueblo, donde aprendieron el valor del trabajo en equipo, la importancia de cuidar los espacios comunes y la alegría de compartir con los demás.
FIN.