La luna está triste
Hace mucho tiempo, la luna comenzó a sentirse triste. Lloraba todas las noches, y su brillo menguaba cada vez más. -¿Qué te sucede, luna querida? -preguntó el cielo estrellado.
-Me siento sola y no encuentro mi lugar en el universo -respondió la luna con voz temblorosa. El cielo estrellado decidió ayudar a su amiga, y convocó a las estrellas más brillantes para una reunión secreta. Juntos, idearon un plan para alegrar el corazón de la luna.
Crearon hermosas figuras en el cielo, formando constelaciones que contaran historias maravillosas. La luna, al verlas, comenzó a sonreír tímidamente. -Espera, aún hay algo más -dijeron las estrellas, y desplegaron un gran arcoíris que rodeó la luna.
La luna, asombrada, comenzó a brillar con fuerza, reflejando los colores del arcoíris. Desde ese día, la luna estuvo llena de alegría, iluminando las noches con su resplandor. Y cada vez que se sentía triste, recordaba el cariño y la solidaridad de sus amigos del cielo.
La luna ya no volvería a estar triste nunca más.
FIN.