La luz de la esperanza en Sombrio Valle
En Sombrio Valle, la oscuridad y la tristeza reinaban sin cesar. Los habitantes, sumidos en la desilusión, apenas se atrevían a levantar la mirada. En medio de esta penumbra, un día llegó un extraño visitante.
Era un simpático hada llamada Estrella, la cual brillaba con una luz especial capaz de iluminar hasta el rincón más oscuro. Estrella decidió quedarse en Sombrio Valle y emprender la tarea de devolver la esperanza a sus habitantes.
Con una sonrisa en el rostro, se acercó a los vecinos y les dijo: - Buenos días, queridos amigos, vengo a ayudarles a recuperar la alegría. - Los habitantes, sorprendidos, no podían creer lo que escuchaban.
¿Cómo alguien podía traer alegría a un lugar tan sombrío? Pero Estrella no se dejó intimidar y, con paciencia y bondad, comenzó a realizar pequeños actos de bondad. Ayudó a reparar casas, sembró hermosos jardines y organizó divertidas actividades. Pronto, los vecinos empezaron a sentir un cambio en el aire.
La luz de la esperanza comenzaba a brillar en Sombrio Valle. Con el tiempo, las calles volvieron a llenarse de risas y color. Las casas lucían radiantes y los habitantes caminaban con la cabeza en alto, llenos de ilusión.
Estrella, feliz de ver el cambio, se despidió con un abrazo cálido. - Gracias por devolvernos la esperanza, Estrella. Nunca olvidaremos tu luz - dijeron los habitantes, agradecidos.
Y así, Sombrio Valle se convirtió en un lugar lleno de alegría y amor, donde la luz de la esperanza brillaba cada día con más fuerza.
FIN.