La Luz del Sol

Había una vez, en un pequeño pueblo rodeado de montañas, una familia de dinosaurios T-Rex que vivía en una casa cerca del patio trasero. El sol siempre brillaba con fuerza sobre ellos y eso les encantaba.

Un día, mientras la mamá T-Rex estaba preparando el desayuno y el papá T-Rex leyendo el periódico, sus dos hijos, Tommy y Lola, jugaban felices en el patio.

Pero algo extraño sucedió ese día: ¡el sol comenzó a desaparecer lentamente! Tommy miró al cielo y dijo sorprendido: "¡Papá! ¡El sol se está escondiendo!"El papá T-Rex dejó su periódico de lado y corrió hacia ellos. Juntos observaron cómo el cielo se oscurecía cada vez más.

"¿Qué podemos hacer?" preguntó Lola preocupada. La mamá T-Rex sugirió: "Podríamos buscar ayuda en la ciudad vecina. Tal vez alguien allí pueda decirnos qué está pasando". Sin perder tiempo, toda la familia empacó algunas provisiones y emprendieron su viaje a la ciudad vecina.

En su camino, encontraron a otros dinosaurios asustados por la oscuridad repentina. Todos estaban buscando respuestas para entender qué estaba ocurriendo con el sol.

Finalmente llegaron a la ciudad vecina y se enteraron de que un malvado hechicero había lanzado un hechizo oscuro sobre el sol para robarle toda su luz. La gente estaba triste porque sin luz solar no podrían cultivar alimentos ni disfrutar del calor necesario para sobrevivir.

Tommy tuvo una idea brillante: "¡Podemos intentar detener al hechicero y devolverle la luz al sol!"La familia T-Rex se convirtió en un equipo valiente y decidido. Juntos, planearon una estrategia para enfrentar al hechicero.

Llegaron hasta el castillo donde vivía el malvado hechicero y lo encontraron riendo mientras veía cómo el sol se debilitaba cada vez más. "¡Detente!" rugió el papá T-Rex con voz fuerte.

El hechicero se sorprendió y preguntó: "¿Quiénes son ustedes?""Somos los dinosaurios T-Rex, ¡y no permitiremos que le hagas daño al sol!" respondió la mamá T-Rex con determinación. El hechicero lanzó un conjuro oscuro hacia ellos, pero la familia T-Rex pudo esquivarlo rápidamente gracias a su agilidad. Tommy saltó sobre el hechicero y logró quitarle su varita mágica.

Con la varita en sus manos, Lola dijo: "Devuelve la luz al sol ahora mismo". El hechicero, derrotado, obedeció.

Usando la varita mágica, Lola rompió el encantamiento oscuro y poco a poco el sol comenzó a brillar nuevamente en todo su esplendor. La gente de la ciudad vecina celebró junto a los dinosaurios T-Rex por haber salvado su hogar de quedarse sin luz solar.

De regreso en casa, Tommy y Lola se sentaron junto a sus padres en el patio trasero. El sol les acariciaba con sus cálidos rayos mientras disfrutaban de una deliciosa merienda. "¡Nunca subestimen el poder de una familia unida!" dijo el papá T-Rex orgulloso.

Y así, la familia T-Rex aprendió que juntos pueden enfrentar cualquier desafío y que siempre hay una solución si nunca se rinden. Desde ese día, su hogar estaba lleno de alegría y el sol siempre brillaba en su patio trasero. Fin.