La Maestra Diamantina Nuñez y el Tercer Año Travieso

La maestra Diamantina Nuñez era conocida por su paciencia y amor por sus estudiantes, pero el tercer año era famoso por ser extremadamente charlatán y travieso.

A menudo, los niños jugaban bromas y la llamaban 'Maestra Tronchatoro' solo para hacerla enojar. Sin embargo, la maestra Diamantina no se enfadaba, en su lugar, ideó un plan para enseñarles el valor del respeto.

Un día, les contó la historia de un pueblo mágico donde todos los habitantes tenían la habilidad de escuchar los deseos de los demás. Les explicó cómo el poder de escuchar y respetar a los demás había traído armonía y felicidad a ese lugar.

Los estudiantes, incrédulos al principio, se sorprendieron al descubrir que al escuchar a los demás, podían entenderse mejor y trabajar en equipo.

Con el tiempo, el tercer año dejó de gastar bromas y se convirtió en un ejemplo de respeto y amabilidad, demostrando que cualquier persona, incluso la más traviesa, puede cambiar cuando se le enseña con amor y paciencia.