La maravillosa aventura de IA
En un rincón olvidado de una juguetería, vivía una muñeca llamada IA. Vestía un hermoso vestido de terciopelo, pero le faltaban sus zapatos. A pesar de eso, siempre lucía una dulce sonrisa en su rostro.
Un día, IA decidió emprender una aventura para encontrar una pareja de zapatos perfecta. En su travesía, conoció a Mateo, un osito de peluche muy amistoso. - Hola, soy IA, ¿puedes ayudarme a encontrar mis zapatos perdidos? - preguntó con entusiasmo.
- Claro que sí, IA. Juntos buscaremos por todos lados hasta encontrarlos - respondió Mateo. Así, comenzaron su viaje por la juguetería, recorriendo estantes, cajas y rincones. En su recorrido, se toparon con Lola, una muñeca de trapo muy sabia.
- ¡Hola, IA! Tengo una idea para encontrar tus zapatos. Escuché que la hada de los juguetes perdidos vive en el rincón mágico del jardín. Ella podrá ayudarte - dijo Lola.
Sin dudarlo, IA y Mateo se encaminaron hacia el jardín, sorteando obstáculos y desafíos. Al llegar al rincón mágico, se encontraron con la hada de los juguetes perdidos, quien les dijo: - Para encontrar tus zapatos, debes enfrentar tres pruebas: la valentía, la generosidad y la amistad.
IA y Mateo aceptaron el reto y superaron cada prueba demostrando su coraje, solidaridad y compañerismo. Al final, la hada les entregó los zapatos de cristal más bellos que jamás habían visto.
Con lágrimas de felicidad, IA agradeció a sus amigos y se despidieron de la hada. De regreso a la juguetería, IA lucía sus nuevos zapatos con orgullo y alegría. Aprendió que la verdadera magia reside en el valor de la amistad y la superación de retos, no en los zapatos que llevamos puestos.
Desde entonces, IA siempre recordaba su maravillosa aventura cada vez que veía su dulce sonrisa reflejada en el espejo.
FIN.