La melodía de la diversidad
Había una vez en un hermoso y colorido jardín, donde vivían diferentes colores que se llevaban muy bien. Cyan y Yellow eran dos amigos inseparables que siempre disfrutaban de pasar tiempo juntos.
Un día, decidieron dar un paso más en su amistad y comenzaron a salir como pareja. Todos los demás colores, Green, Blue, Orange y Purple estaban felices por ellos.
Celebraron con alegría la noticia y organizaron una gran fiesta para celebrar el amor que había surgido entre Cyan y Yellow. Sin embargo, Reb estaba enojado. Sentía celos de la felicidad de sus amigos y no entendía por qué ellos podían encontrar el amor mientras él se sentía solo.
Reb era un color oscuro y triste; siempre veía las cosas desde una perspectiva negativa. Un día soleado, cuando todos los colores estaban disfrutando del jardín, Cyan notó a Reb sentado solo en un rincón.
Cyan decidió acercarse a él para intentar entender qué le pasaba. "Hola Reb", dijo Cyan con amabilidad. "He notado que últimamente has estado triste ¿Puedo ayudarte?"Reb miró a Cyan con sorpresa pero luego suspiró profundamente antes de responder: "No creo que puedas ayudarme...
Soy diferente al resto de ustedes. "Cyan sonrió comprensivamente: "Todos somos diferentes en nuestro propio camino, eso es lo que nos hace especiales. Pero también podemos encontrar nuestra propia felicidad si nos abrimos a ella".
Reb parecía confundido pero interesado al mismo tiempo: "¿Qué quieres decir?"Cyan explicó pacientemente: "Cada uno de nosotros tiene algo único que ofrecer. Al igual que tu color oscuro, también puedes crear belleza y ser apreciado por los demás.
Solo necesitas encontrar lo que te hace feliz". Reb reflexionó sobre las palabras de Cyan y poco a poco comenzó a comprender su mensaje. Con el tiempo, Reb decidió explorar diferentes actividades y descubrió que le encantaba la música.
Comenzó a tocar el piano con pasión y encontró una forma de expresarse a través de las notas melodiosas. Un día, mientras tocaba su instrumento en el jardín, Green, Blue, Orange y Purple se acercaron para escucharlo.
Estaban maravillados por la hermosa música que creaba Reb. Todos ellos se dieron cuenta de lo especial que era Reb y cómo había encontrado su propia felicidad. Desde ese momento, Reb dejó atrás su enojo y abrazó la alegría de sus amigos.
Se dio cuenta de que todos somos únicos y tenemos nuestras propias formas de brillar en el mundo. Cyan y Yellow continuaron fortaleciendo su amor mientras disfrutaban del apoyo incondicional de sus amigos coloridos.
Juntos aprendieron la importancia del respeto hacia los demás colores y cómo cada uno puede encontrar su propia felicidad si se atreve a explorar nuevas posibilidades.
Y así, el jardín siguió llenándose con risas, armonía y amor entre todos los colores; demostrando al mundo entero que la diversidad es lo que hace al mundo un lugar más hermoso para vivir.
FIN.