La melodía triunfante

Había una vez en una hermosa laguna, un grupo de flamencos que vivían felices y cantaban melodías maravillosas.

Cada día, los flamencos se reunían alrededor de la orilla de la laguna para disfrutar del sol y bailar al ritmo de su música. Un día, mientras los flamencos estaban ensayando una nueva canción, comenzaron a escuchar truenos en el cielo. Todos se asustaron y empezaron a correr hacia sus nidos para protegerse de la tormenta.

Pero uno de los flamencos más valientes, llamado Fito, decidió quedarse afuera para enfrentar lo que sea que estuviera causando esos ruidos.

Fito voló hacia el cielo oscuro y vio algo muy extraño: ¡un monstruo gigante con ojos rojos brillantes! El monstruo estaba asustando a todos los animales de la laguna con sus rugidos fuertes y amenazadores. Fito sabía que tenía que hacer algo para salvar a sus amigos.

Sin pensarlo dos veces, Fito volvió rápidamente a la laguna y les contó a los demás sobre el monstruo. Los flamencos estaban temerosos pero decidieron confiar en su amigo valiente. Juntos idearon un plan para ahuyentar al monstruo utilizando su amor por la música.

Los flamencos formaron un círculo alrededor del monstruo y comenzaron a tocar sus instrumentos con todas sus fuerzas. La música resonaba en toda la laguna y era tan hermosa que incluso los truenos se detuvieron para escucharla.

El sonido mágico llenó el corazón del monstruo, quien se dio cuenta de que su actitud asustadora no estaba bien. Se transformó en un simpático ser y comenzó a bailar al ritmo de la música junto a los flamencos.

Desde ese día, el monstruo y los flamencos se convirtieron en grandes amigos. El monstruo ayudaba a proteger la laguna de otros peligros y los flamencos le mostraban cómo disfrutar de la belleza de la música.

La laguna se volvió aún más especial gracias a esta amistad única entre los flamencos y el antiguo monstruo. Los animales de todo el mundo venían a visitarlos para escuchar sus hermosas melodías y aprender sobre la importancia del respeto y la bondad hacia los demás.

Y así, todos vivieron felices cantando y bailando juntos en esa maravillosa laguna llena de amor, música y amistad. Fin