La Misión a Saturno
Había una vez una niña llamada Milena que soñaba con ser astronauta y viajar al espacio. Le encantaba leer libros sobre los planetas, las estrellas y las galaxias.
Siempre se preguntaba cómo sería estar flotando en el espacio y ver la Tierra desde arriba. Un día, Milena recibió una invitación para unirse a la misión espacial más importante de la historia.
La NASA había seleccionado a Milena por su inteligencia y valentía para formar parte del equipo que exploraría Saturno. Milena no podía creerlo, estaba tan emocionada que no podía dejar de saltar de alegría. "¡Voy a cumplir mi sueño!", gritó mientras abrazaba a su familia.
El día del lanzamiento llegó y Milena estaba lista para despegar hacia el espacio. Su nave espacial era muy moderna y tenía todo lo necesario para sobrevivir en el espacio durante meses. Durante los primeros días todo fue maravilloso, pero pronto comenzaron los problemas.
Una tormenta de meteoritos impactó contra la nave dañando varios sistemas importantes. El equipo intentó repararlos pero era demasiado peligroso salir al espacio exterior con tantos escombros volando cerca.
La situación empeoró cuando descubrieron que habían perdido contacto con la Tierra debido a los daños causados por los meteoritos. Milena estaba preocupada pero sabía que tenía que mantenerse positiva para poder ayudar al equipo a encontrar soluciones creativas e ingeniosas ante cada problema que surgiera.
Sin embargo, después de varias semanas sin comunicación con la Tierra, algo extraño empezó a suceder: parecía como si la nave se estuviera moviendo sola.
De repente, apareció una figura extraña en la pantalla de la nave y les habló:"-Hola, soy un ser extraterrestre que ha estado siguiéndolos desde hace algunos días. Me di cuenta de que necesitaban ayuda y he venido a ayudarlos. "Milena estaba sorprendida pero muy agradecida por esta ayuda inesperada.
El extraterrestre les explicó cómo reparar los sistemas dañados y cómo volver a contactar con la Tierra. Después de varios días trabajando juntos, finalmente lograron reparar todo lo necesario para volver al planeta Tierra. Cuando regresaron a casa, Milena recibió una gran bienvenida por parte de su familia y amigos.
Todos querían conocerla y preguntarle acerca de su aventura en el espacio. Milena sabía que había vivido una experiencia única e inspiradora gracias a su valentía y perseverancia durante los momentos más difíciles del viaje.
A partir de ese momento, decidió compartir sus experiencias con otros niños que también soñaban con explorar el universo algún día.
Así fue como Milena se convirtió en un referente para muchos niños que sueñan con aventurarse en el espacio exterior, demostrando que nunca es tarde ni imposible perseguir nuestros sueños si tenemos confianza en nosotros mismos y somos capaces de enfrentarnos a las adversidades con creatividad e ingenio.
FIN.