La misión en el bosque oscuro


Había una vez en un bosque encantado donde las vocales O, I y U vivían felices y contentas. Ellas eran muy amigas y siempre se apoyaban mutuamente en todo lo que hacían.

Un día, mientras paseaban por el bosque, se encontraron con el temible lobo feroz. - ¡Oh no! ¡Es el lobo feroz! -exclamó la vocal O, temblando de miedo. - Tranquila, amiga O, estamos juntas y podemos enfrentar cualquier peligro -dijo la vocal U con valentía.

El lobo feroz se acercó lentamente a ellas con una sonrisa maliciosa en su rostro. Pero las vocales no perdieron la calma y pensaron rápidamente en cómo salir de esa situación. - ¿Qué hacemos ahora? -preguntó la vocal I nerviosa.

- Debemos usar nuestra astucia e inteligencia para engañar al lobo -respondió la vocal U con determinación.

Entonces, las tres vocales idearon un plan para distraer al lobo feroz mientras escapaban corriendo hacia la casa encantada que había en lo profundo del bosque. El lobo las persiguió furioso, pero las vocales eran más rápidas y lograron llegar a salvo a su destino. Una vez dentro de la casa encantada, las vocales se sintieron seguras y protegidas.

Pero pronto descubrieron que no estaban solas allí. Un grupo de conejitos asustados las recibió con alegría y les contaron sobre un hechizo maligno que había caído sobre la casa.

- ¿Qué podemos hacer para romper este hechizo? -preguntó la vocal I preocupada. Los conejitos les explicaron que debían encontrar tres objetos mágicos escondidos en diferentes partes del bosque para poder revertir el hechizo y liberar la casa encantada.

Sin dudarlo ni un segundo, las vocales O, I y U se ofrecieron a ayudar a los conejitos en esta misión tan importante. Así comenzó una emocionante aventura donde las vocales enfrentaron todo tipo de desafíos y obstáculos.

Con ingenio, valentía y trabajo en equipo lograron superar cada prueba hasta encontrar los tres objetos mágicos necesarios para romper el hechizo de la casa encantada. Finalmente, cuando colocaron los objetos en su lugar correcto, un destello brillante iluminó toda la casa y el hechizo fue roto.

La alegría invadió a todos los presentes y los conejitos agradecieron enormemente a las valientes vocales por su ayuda incondicional. Desde ese día, las vocales O, I y U fueron recordadas como heroínas en el bosque encantado.

Su historia inspiradora se difundió por todo el lugar como un ejemplo de amistad, coraje y solidaridad que nunca sería olvidado.

Dirección del Cuentito copiada!