La misión salvadora de Lunita, Solecito y Estrellita


En la ciudad de Pachacutec, una ola de calor había llegado trayendo consigo un problema aún mayor: el dengue.

Los niños pre kinder del Jardín "Rayito de Sol" estaban preocupados al escuchar a los adultos hablar sobre la importancia de cuidarse para evitar picaduras de mosquitos y golpes de calor. Un día, la maestra Clara reunió a todos los niños en el patio del jardín para hablarles sobre cómo protegerse.

- ¡Buenos días, mis queridos rayitos de sol! Hoy quiero contarles una historia muy especial. ¿Están listos? -preguntó la maestra Clara con entusiasmo. Los niños asintieron emocionados y se sentaron en círculo alrededor de ella.

- Había una vez en Pachacutec, un grupo de valientes amigos llamados Lunita, Solecito y Estrellita. Ellos vivían aventuras increíbles juntos, pero un día descubrieron que la ciudad estaba en peligro por la ola de calor y el dengue -comenzó a relatar la maestra Clara.

Los niños escuchaban atentamente mientras imaginaban a los personajes en su mente. - Lunita, Solecito y Estrellita decidieron tomar cartas en el asunto y buscaron formas creativas para protegerse del sol y los mosquitos.

Lunita sugirió usar sombreros y protector solar para no quemarse con los rayos del sol. Solecito propuso vaciar recipientes con agua estancada donde los mosquitos podían reproducirse y así evitar el dengue.

Y Estrellita pensó en colocar mosquiteros en las ventanas para que no ingresen insectos peligrosos -continuó la maestra Clara. Los niños sonreían emocionados con las ideas de los personajes mientras aprendían sobre medidas preventivas importantes.

- Juntos, Lunita, Solecito y Estrellita lograron mantenerse seguros y sanos durante la ola de calor gracias a su ingenio y trabajo en equipo. Así demostraron que siempre hay soluciones cuando nos cuidamos unos a otros -concluyó la maestra Clara con una gran sonrisa.

Los niños aplaudieron felices ante tan inspiradora historia y se levantaron dispuestos a seguir las recomendaciones para protegerse del sol y prevenir el dengue. Desde ese día, cada niño se convirtió en un pequeño guardián del bienestar colectivo e inspiraba a otros a seguir sus pasos.

La ciudad de Pachacutec floreció nuevamente bajo el cuidado amoroso de sus habitantes más jóvenes.

Y así, entre juegos bajo la sombra fresca y canciones divertidas sobre prevención, los niños pre kinder aprendieron valiosas lecciones que llevarían consigo toda su vida: trabajar juntos por un objetivo común es clave para superar cualquier desafío que se presente.

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