La misteriosa pijamada de las nenas aventureras
Había una vez un grupo de amigas, Milagros, Valentina, y Sofía, que decidieron hacer una pijamada en la casa de Milagros.
Estaban ansiosas por pasar una noche llena de diversión, pero cuando comenzaron a escuchar extraños ruidos en la casa, se dieron cuenta de que algo misterioso estaba sucediendo. Decidieron convertir la pijamada en una aventura de investigación. -“¿Escucharon ese ruido? ¡Es como si hubiera alguien en la casa! ” exclamó Milagros.
-“¡Tranquilas, seguro es solo tu imaginación divagando! ”, dijo Valentina intentando calmar a sus amigas. Pero Sofía, siempre la más valiente del grupo, propuso hacer un ritual de invocación a los espíritus para descubrir la verdad detrás de los ruidos.
Juntas, buscaron en internet cómo hacerlo de manera segura y decidieron seguir adelante con su plan. Realizaron el ritual con velas y incienso en el centro de la habitación, y luego se tomaron de las manos mientras cerraban los ojos y recitaban palabras de valentía y protección.
De repente, sintieron un escalofrío recorrer el ambiente, y un suave murmullo comenzó a llenar la habitación. El misterio parecía estar cerca de ser resuelto. Decidieron seguir investigando y se adentraron en las profundidades de la casa.
Al llegar al ático, encontraron un viejo cofre con un diario lleno de anotaciones antiguas. Descubrieron que la casa había sido el hogar de una familia muy unida, pero un trágico accidente había dejado su espíritu atado a la casa.
Con valentía, las tres amigas prometieron ayudar al espíritu a encontrar la paz. Juntas, organizaron un ritual de despedida y liberación, llevando a cabo cada paso con cuidado y respeto. Por fin, los ruidos cesaron, y la casa quedó en calma.
Las nenas se abrazaron, sintiéndose orgullosas de haber enfrentado sus miedos y ayudado a un espíritu necesitado.
Desde ese día, su amistad se fortaleció aún más, y se convirtieron en las nenas aventureras que siempre estarían listas para resolver cualquier misterio que se cruzara en su camino.