La Monita Valiente
En una selva tropical de Argentina, vivía una monita llamada Valentina.
Sus padres, don Mono y doña Mona, le habían advertido una y mil veces que no se alejara del árbol principal, ya que era peligroso adentrarse en la densa vegetación. Sin embargo, Valentina, con una curiosidad más grande que la selva misma, decidió ignorar las advertencias y emprender su propia aventura. Persiguiendo mariposas y jugando con otras criaturas del bosque, pronto se perdió en medio de la frondosidad.
Al darse cuenta de que estaba sola y asustada, Valentina comenzó a reflexionar sobre su desobediencia. Decidió que debía encontrar el camino de regreso a casa.
En su travesía, conoció a una variedad de animales, algunos amigables y otros no tanto, pero cada encuentro le enseñó valiosas lecciones sobre la importancia de escuchar a los mayores, la amistad y la valentía.
Finalmente, con determinación y sabiduría adquirida, Valentina logró regresar a su hogar, donde abrazó a sus padres con alegría y les contó todo lo que había aprendido.
A partir de ese día, la monita Valentina se convirtió en un ejemplo para los demás animales de la selva, demostrando que la desobediencia puede conducir a grandes aventuras, pero también a importantes reflexiones.
FIN.