La Muñeca Traviesa
En un pequeño pueblo rodeado de montañas, vivía una niña llamada Sofía. Sofía tenía una muñeca muy especial llamada Marina. Marina era una muñeca de porcelana con vestido azul y ojos brillantes.
Un día, mientras Sofía jugaba en el jardín, Marina desapareció misteriosamente. Sofía buscó por todas partes, pero no pudo encontrar a su muñeca. Decidida a encontrar a Marina, Sofía emprendió un viaje por el bosque, preguntando a todos los animales si habían visto a su muñeca.
Finalmente, un conejito le dijo que Marina había sido vista en la cima de la montaña más alta. Sin dudarlo, Sofía comenzó a escalar la montaña.
Al llegar a la cima, se encontró con Marina, quien le explicó que quería explorar el mundo más allá del jardín. Sofía le explicó a Marina que, aunque entendía su deseo de aventura, no podía dejar de lado su responsabilidad de cuidarla. Juntas, emprendieron el regreso al pueblo.
A partir de ese día, Sofía y Marina compartieron muchas aventuras, pero siempre juntas y de forma segura.
FIN.