La niña dragón

En una pequeña ciudad de Argentina, vivía Valentina, una niña curiosa y aventurera que siempre estaba buscando nuevas formas de divertirse. Un día, Valentina decidió explorar el viejo desván de su abuela, donde encontró un misterioso libro de hechizos.

Sin pensarlo dos veces, comenzó a recitar una de las fórmulas mágicas, pero algo salió terriblemente mal.

En lugar de desaparecer, como indicaba el hechizo, Valentina empezó a sentir un extraño cosquilleo en todo su cuerpo y, de repente, se convirtió en un majestuoso dragón. Al principio, Valentina se asustó al ver sus escamas brillantes y sus enormes alas, pero pronto se dio cuenta de que este nuevo aspecto le brindaba poderes extraordinarios.

Decidió que, en lugar de lamentarse, aprovecharía esta transformación para hacer el bien. Valentina voló por los cielos, ayudando a quienes lo necesitaban y protegiendo el medio ambiente. Su valentía y generosidad inspiraron a todos a su alrededor.

Eventualmente, con la ayuda de un sabio mago, Valentina descubrió cómo revertir el hechizo y volvió a su forma humana. Aunque extrañaba sus habilidades de dragón, Valentina sabía que siempre llevaría consigo el valor y la compasión que había aprendido durante su extraordinaria aventura.