La niña y su cohete de Villa Esperanza
Había una vez en un pequeño pueblo llamado Villa Esperanza, una niña llamada Lola que soñaba con ser astronauta. Desde muy pequeña, miraba las estrellas todas las noches y se maravillaba con la inmensidad del universo.
Un día, la escuela de Villa Esperanza organizó un concurso de ciencias para los estudiantes. El desafío era crear un proyecto innovador que pudiera ayudar a mejorar la vida en el pueblo.
Lola decidió presentar su idea de construir un cohete espacial hecho con materiales reciclados. Lola pasó días y noches trabajando en su proyecto, recolectando botellas de plástico, cartón y latas para construir su cohete.
A pesar de que muchos se burlaban de ella por querer ser astronauta, Lola siguió adelante con determinación y pasión. Finalmente, llegó el día del concurso. Todos los proyectos eran increíbles, pero cuando llegó el turno de Lola de presentar su cohete espacial hecho a mano, todos quedaron asombrados.
El jurado quedó impresionado por la creatividad y el esfuerzo de Lola, otorgándole el primer premio. -¡Felicidades Lola! ¡Eres una verdadera científica! -dijo la directora emocionada.
Lola saltaba de alegría al recibir su premio y ver cómo su sueño estaba un paso más cerca de hacerse realidad. Sin embargo, algo inesperado sucedió esa noche: mientras observaba las estrellas desde su ventana, vio una luz extraña en el cielo. Intrigada, Lola decidió investigar qué era aquella luz misteriosa.
Para sorpresa de todos en Villa Esperanza, resultó ser un meteorito que estaba a punto de chocar contra el pueblo. Sin pensarlo dos veces, Lola corrió hacia su cohete espacial y subió decidida a detener al meteorito.
Con valentía y astucia, logró dirigir su cohete hacia el meteorito y desviarlo justo a tiempo evitando así una catástrofe en Villa Esperanza. Todos en el pueblo celebraron a Lola como una heroína y reconocieron que sus sueños e ideas podían cambiar el mundo.
Desde ese día en adelante, Lola siguió persiguiendo sus sueños sin importar lo imposible que parecieran. Se convirtió en la primera astronauta argentina en viajar al espacio y descubrir nuevos planetas llenos de esperanza para todos los habitantes del universo.
FIN.