La Noche de las Sorpresas en el CEIP Barcelos
Era una tarde tranquila en el CEIP Barcelos, y los estudiantes estaban ansiosos por la llegada de la Noche de las Sorpresas, un evento que celebraba el espíritu de la amistad y la creatividad de la escuela. Zoe, Lucas, Ángeles, Alexia, Alam, Iria y Julia se habían reunido para organizar una obra de teatro, pero la atmósfera se tornó inquietante al escuchar rumores sobre un antiguo secreto que rondaba el colegio.
"¿Escucharon que hay un legendario fantasma en el CEIP?" - preguntó Lucas, con los ojos muy abiertos.
"¿Un fantasma? ¡Es solo una leyenda!" - respondió Iria, aunque con un poco de miedo en su voz.
"Yo creo que deberíamos averiguarlo, ¿qué tan malo podría ser?" - sugirió Alexia.
Decididos a desvelar el misterio, el grupo se encontró con la profesora Isa, quien los escuchó con atención.
"¡No se preocupen, chicos! Las leyendas suelen tener un trasfondo interesante. Solo deben ser cuidadosos y divertirse en su búsqueda. La curiosidad es el primer paso del conocimiento" - les dijo con una sonrisa.
Inspirados por sus palabras, decidieron investigar y se dirigieron a la biblioteca del colegio. Allí, encontraron un viejo libro de leyendas de la escuela. A medida que pasaban las páginas, se encontraron con la historia de un niño llamado Matías, que desapareció una noche de fiesta hace muchos años y nunca fue encontrado. Algunos decían que su espíritu aún merodeaba los pasillos, buscando compañía.
"¡Eso suena aterrador!" - exclamó Julia.
"Pero también suena algo triste. Tal vez él solo quiera comunicarse" - reflexionó Zoe.
Mientras discutían sobre el significado de la leyenda, el director Luis apareció de repente.
"¿Qué están haciendo, chicos?" - preguntó, con una mirada curiosa.
Les contaron sobre su investigación y, a pesar de que Luis se rió de la idea de un fantasma, notó que los niños estaban asustados.
"Recuerden que las historias pueden enseñarnos, más que asustarnos. Cada personaje, incluso los que parecen aterradores, tiene una historia que contar" - dijo el director, alentando a los chicos a continuar con su obra e incorporar un parte de la leyenda en su guion.
Emocionados por la idea, comenzaron a trabajar en su obra de teatro, "El Fantasma de Matías". Durante los ensayos, comenzaron a darle un giro positivo a la historia, transformando el miedo en amistad.
Finalmente, la noche del evento llegó. Al presentarse, el escenario estaba iluminado de colores, y los padres y otros estudiantes estaban ansiosos por ver la actuación.
Con un ritmo vibrante, el grupo comenzó la obra. Cuando llegó el momento en que Matías, el fantasma, entraba, Lucas se disfrazó con una sábana blanca y empezó a actuar de forma cómica, haciendo reír a todos.
"¡Hola a todos! No puedo encontrar la fiesta... ¿me pueden ayudar?" - dijo Lucas, causando risas y aplausos en la audiencia.
En ese momento, Zoe tomó la palabra, transformando la tristeza de Matías en un mensaje de esperanza.
"Si un día te sientes solo, recuerda que siempre hay alguien que te quiere. ¡No tengas miedo!" - dijo Zoe, mirando a sus compañeros con complicidad.
La obra fue un éxito rotundo y, al finalizar, el público se levantó a aplaudir. Los niños se sintieron llenos de alegría y una sensación de logro.
"Matías, ven a nuestra fiesta" - gritó Iria, como parte de la historia, dando un giro final a la trama.
"¡Sí, ven! Hay muchos amigos para acompañarte!" - añadió Ángeles, creando un ambiente de alegría y amistad.
La noche finalizó con una fiesta, donde todos celebraron juntos. A partir de ese día, decidieron que cada Noche de Sorprensas, la leyenda de Matías sería una representación sobre cómo superar el miedo y aprender a compartir momentos, incluso con quienes ya no están.
Los chicos se despidieron de la obra sintiéndose inspirados y comprendiendo que aunque hay historias que pueden dar miedo, a menudo están llenas de enseñanzas y oportunidades para unir a las personas.
"Fue una experiencia increíble" - dijo Alexia, mientras se abrazaban entre risas.
"Y, seguramente, todos tendríamos más historias que contar" - agregó Alam, pensando en las aventuras futuras.
Así, en el CEIP Barcelos, la leyenda de Matías se convirtió en una hermosa manera de recordar la importancia de la amistad, la creatividad y el valor de enfrentar lo desconocido.
FIN.