La osa y el hechizo del bosque
Había una vez en el bosque, una osa y su hijo osito. Vivían felices en su cueva y siempre se divertían juntos jugando a atrapar peces en el río y recolectando frutas del bosque.
Un día, mientras jugaban, osito comenzó a sentir un dolor agudo en su costado. La osa lo llevó inmediatamente al médico del bosque, quien les informó que tenía un problema en el riñón derecho y necesitaba ser operado.
La operación fue exitosa pero durante la recuperación de osito, apareció una hada malvada que habitaba en el bosque. Ella no soportaba ver tanta felicidad entre madre e hijo y decidió hacerles la vida imposible.
La hada malvada lanzó un hechizo sobre la cueva de los osos para que nunca más pudieran salir de allí. La tristeza invadió a la osa al ver que no podía llevar a su hijo enfermo a pasear por el bosque ni jugar con él como antes.
Pero entonces recordaron los tres cuentos para dormir que les contaban siempre antes de dormir: "El valor de la amistad", "La importancia de ser valiente" y "Ser feliz con lo que tienes".
Se dieron cuenta de que debían aplicar estos valores para vencer al hechizo. Así fue como decidieron trabajar juntos para encontrar una solución. Osita usó su coraje para explorar cada rincón de la cueva hasta encontrar una pequeña abertura por donde podrían escapar.
Mientras tanto, Osa mantuvo alta su moral recordándole a Osito lo importante que era tener fe en sí mismo. Finalmente, lograron salir de la cueva y enfrentarse a la hada malvada.
Con el poder de su amistad y el valor que habían aprendido en los cuentos para dormir, derrotaron a la hada y restauraron la paz en el bosque. Antes de dormir esa noche, Hada les visitó para asegurarse de que estaban bien.
"Hoy aprendimos que juntos podemos superar cualquier obstáculo", dijo Osa. "Y siempre recordaremos lo importante que es tener amigos verdaderos", agregó Osito. "Hasta mañana queridos amigos", dijo Hada mientras desaparecía en un destello dorado. "Buenas noches".
FIN.