La Perrita Amable
. Todas las tardes, después de que Ailen y Uma vuelven de la escuela, Pipina se emociona al verlas llegar a casa porque sabe que es hora de jugar.
Un día, mientras jugaban en el jardín trasero, Pipina vio un gato callejero caminando por el vecindario. La perrita intentó perseguirlo, pero Ailen y Uma la detuvieron para evitar que se metiera en problemas. "Pipina, no debes correr detrás del gato", le dijo Ailen con una sonrisa amable.
"Sí, puedes lastimarte o lastimarlo sin querer", agregó Uma con preocupación. Pipina entendió lo que sus dueñas le dijeron y decidió no perseguir más al gato. En cambio, comenzaron a jugar juntas con su pelota favorita.
Mientras jugaban, Pipina pensaba en cómo podría ser amigable con otros animales sin asustarlos o lastimarlos. Al día siguiente, cuando salieron al parque a caminar, Pipina vio otro perro acercándose hacia ellas.
En lugar de ladrarle o correr hacia él como solía hacer antes, Pipina comenzó a mover la cola lentamente y esperar pacientemente hasta que el otro perro estuviera lo suficientemente cerca para saludarlo adecuadamente. "¡Hola! ¿Cómo estás?", le dijo Pipina al nuevo perro con entusiasmo.
El otro perro respondió moviendo la cola también y los dos empezaron a jugar juntos felizmente mientras Ailen y Uma observaban orgullosas desde un banco cercano.
Desde ese día en adelante, cada vez que veían un animal nuevo, Pipina se aseguraba de ser amable y respetuosa. Incluso comenzó a hacer amigos con otros animales del vecindario y se convirtió en la mascota más querida de todos.
Ailen y Uma estaban felices de ver cómo su pequeña perrita crecía en una perra amistosa y amorosa que no solo jugaba bien sino que también sabía cómo hacer nuevos amigos. Y así, Pipina aprendió la importancia de ser amable con los demás, incluso si eran diferentes a ella.
FIN.