La perrita valiente y el bebé velociraptor

La familia estaba disfrutando de un hermoso día de viaje por el bosque cuando, de repente, la carretera desapareció y se encontraron perdidos en medio del bosque.

Papá intentó encontrar el camino de regreso con su GPS, pero no había señal. La mamá trató de llamar a alguien por teléfono, pero tampoco tenían señal. Lorenzo estaba asustado y Pata ladraba nerviosa. Manuel, la tortuga, simplemente seguía moviéndose lentamente hacia adelante.

Mientras caminaban buscando una salida del bosque, vieron algo increíble: ¡un dinosaurio! Era enorme y parecía muy peligroso. Pero luego se dieron cuenta de que no era solo uno... habían muchos más. "¡Papá! ¡Mamá! ¿Qué hacemos ahora?", preguntó Lorenzo temblando.

"Tranquilo hijo", dijo papá tratando de mantener la calma. "Solo tenemos que ser cuidadosos y seguir juntos". La familia empezó a caminar lentamente mientras observaban los enormes animales prehistóricos a su alrededor.

De repente, las cosas empeoraron aún más: un T-Rex apareció justo frente a ellos. "¡Corran!", gritó mamá mientras tomaba a Lorenzo en sus brazos y corrían lo más rápido que podían. Pero entonces ocurrió algo sorprendente: Pata corrió hacia el T-Rex ladrando como si fuera un perro guardián feroz.

El T-Rex se detuvo sorprendido por el pequeño animalito valiente. Los padres miraban incrédulos cómo su perrita lograba mantener a raya al T-Rex. De repente, el dinosaurio se dio media vuelta y desapareció entre los árboles.

"¡Bravo Pata! ¡Eres la mejor perrita guardiana del mundo!", exclamó Lorenzo, abrazando a su fiel amiga. La familia continuó su camino mientras Pata seguía vigilante para protegerlos de cualquier peligro.

A lo lejos, vieron una luz que parecía ser un campamento. Se acercaron con cautela y encontraron a un grupo de científicos que estaban estudiando los dinosaurios en el bosque.

Los científicos les explicaron que habían creado una máquina del tiempo que accidentalmente había llevado a los dinosaurios al presente. Pero gracias a la valentía de Pata, pudieron encontrarlos y llevarlos de regreso al pasado donde pertenecían. —"Wow" , dijo Lorenzo emocionado por haber tenido esta aventura única. "¡Nunca olvidaré este día!".

La familia aprendió mucho sobre la importancia de cuidar el medio ambiente y respetar las criaturas vivas en nuestro planeta. Y también aprendieron que incluso los más pequeños pueden hacer cosas grandes cuando tienen coraje y determinación como su amada Pata.

Desde ese día, la familia siguió viajando juntos pero ahora con un nuevo integrante: Manuel el velociraptor bebé adoptado por ellos mismos como parte de su compromiso ambientalista.