La piscina de la amistad

Había una vez un perro llamado Ruffo, un caballo llamado Estrella y un niño llamado Juan. Los tres eran grandes amigos y les encantaba pasar tiempo juntos en la casa de campo de la abuela de Juan.

Un día caluroso de verano, Juan tuvo una brillante idea: ¡construir una piscina en el jardín para refrescarse! Los tres amigos se pusieron manos a la obra.

Ruffo cavaba un agujero con sus patas, Estrella llevaba agua en su boca desde el pozo cercano y Juan traía baldes para ayudar. Después de mucho esfuerzo, finalmente terminaron la piscina. Se veía hermosa y reluciente bajo el sol. Todos estaban emocionados por darse un chapuzón.

"¡Qué linda quedó la pileta! ¡Estoy ansioso por meterme!", dijo Juan emocionado. "¡Yo también quiero nadar! ¿Puedo tirarme primero?", preguntó Ruffo moviendo la cola. "¡Esperen chicos, antes tenemos que ponerle agua a la pileta!", señaló Estrella con entusiasmo.

Los tres amigos corrieron a buscar más agua al pozo y llenaron rápidamente la piscina. Una vez lista, decidieron jugar al clásico juego del tiburón en el que uno hacía de tiburón y los demás debían nadar sin ser atrapados.

El juego estaba muy divertido hasta que Ruffo decidió hacer trampa y agarró a Estrella con sus dientes simulando ser un tiburón real. Estrella se asustó y comenzó a correr alrededor de la piscina mientras Juan intentaba detener a Ruffo.

"¡Ruffo, eso no se hace! Dejá a Estrella tranquila", gritaba Juan mientras corría detrás del travieso perro. "Perdón, perdón. No quise asustarte, Estrella", balbuceaba Ruffo arrepentido. Finalmente lograron detenerse y los tres amigos se abrazaron riendo por lo ocurrido.

Fue entonces cuando descubrieron que lo importante no era ganar o perder, sino disfrutar juntos cada momento compartido. Así pasaron el resto del día jugando en su nueva piscina, creando recuerdos inolvidables que guardarían por siempre en sus corazones.

Y así comprendieron que la verdadera diversión está en compartir momentos especiales con quienes más queremos. Y colorín colorado, este cuento ha terminado pero nuestra amistad ha comenzado.