La Primera Vez en la Escuela Nueva

Martina era una niña curiosa y alegre que siempre estaba lista para enfrentar nuevos desafíos. Un día, su familia se mudó a un nuevo barrio y Martina tuvo que empezar en una escuela diferente.

Estaba emocionada, pero también un poco nerviosa por la idea de hacer nuevos amigos y adaptarse a un lugar desconocido. "¡Hoy es un gran día, Martina! Estoy segura de que te va a ir genial en tu nueva escuela", dijo su mamá con una sonrisa.

Llegaron a la escuela y Martina se encontró con un edificio grande y bullicioso, lleno de niños y niñas que reían y jugaban.

Al principio, se sintió abrumada, pero recordó las palabras de su mamá y decidió enfrentar la situación con valentía. Durante el recreo, se acercó a un grupo de niños que estaban jugando a la rayuela y les preguntó si podía unirse.

Para su alivio, los niños la recibieron con alegría y en poco tiempo estaba riendo y divirtiéndose con sus nuevos amigos. A medida que pasaban los días, Martina se fue adaptando cada vez más a su escuela nueva. Descubrió que le encantaba la clase de arte y que tenía un talento especial para dibujar.

También hizo amigos cercanos que compartían sus intereses y su espíritu aventurero. Pronto, la escuela nueva se convirtió en un lugar lleno de diversión, aprendizaje y amistades.

Martina aprendió que los cambios, aunque puedan ser aterradores al principio, a menudo traen nuevas oportunidades y experiencias emocionantes. Y así, con su valentía y optimismo, Martina demostró que la primera vez en la escuela nueva puede ser el comienzo de grandes aventuras.