La Princesa Aurora y el Desafío de la Voz
Había una vez en un lejano reino un hermoso castillo donde vivía la princesa Aurora. Ella era conocida por su dulce voz y su bondadoso corazón.
Un día, Malefica, la malvada bruja del bosque, decidió lanzarle un hechizo a su amado príncipe para separarlo de ella. Aurora estaba desesperada al ver a su príncipe en peligro y decidió buscar ayuda en la hada madrina del reino.
La hada escuchó sus súplicas y le otorgó el don de la resistencia y el poder de mandar con su voz. Con este nuevo don, Aurora se sintió valiente y decidida a enfrentarse a Malefica para salvar a su amado príncipe.
Se adentró en el oscuro bosque donde habitaba la malvada bruja, dispuesta a hacer lo que fuera necesario para liberar a su príncipe.
Al llegar al castillo de Malefica, la princesa se encontró con toda clase de obstáculos: dragones que escupían fuego, espinas afiladas que protegían las puertas y encantamientos malignos que intentaban detenerla. Pero Aurora no se dio por vencida; con cada paso que daba, sentía cómo el poder de su voz crecía dentro de ella.
Finalmente, llegó ante Malefica quien intentaba mantener al príncipe bajo su hechizo.
Aurora levantó la mirada con determinación y dejando fluir todo su poderoso don gritó con fuerza:"¡Malefica, tus días de maldad han llegado a su fin! Con mi voz te ordeno que deshagas tu hechizo y liberes a mi amado príncipe!"La sala tembló con la potencia de sus palabras y Malefica retrocedió sorprendida ante tanta valentía. Sin más opción, la bruja liberó al príncipe del hechizo y desapareció entre sombras.
El príncipe despertó confundido pero feliz al ver a Aurora frente a él. La princesa lo abrazó con ternura mientras le explicaba todo lo ocurrido. Desde ese día, juntos juraron siempre protegerse mutuamente.
Aurora comprendió entonces que no necesitaba ser rescatada por un caballero valiente; tenía todo el coraje y fortaleza necesarios dentro de sí misma para enfrentar cualquier adversidad.
Y así, gracias al poder de su voz y su resistencia interior, logró salvar a quien más quería demostrando que todos tenemos fortalezas ocultas esperando ser descubiertas cuando más las necesitamos.
FIN.