La Princesa Sapo, el Caballero y la Silla



Había una vez en un reino encantado, una hermosa princesa llamada Ana. A diferencia de las demás princesas, a Ana le encantaba pasar tiempo en el jardín, jugando con las ranas y los sapos.

Un día, mientras paseaba por el jardín, se encontró con un sapo muy peculiar. El sapo le contó que en realidad era un príncipe encantado que necesitaba un beso de amor para romper el hechizo que lo había transformado.

Ana, sin dudarlo, le dio un beso y el sapo se convirtió en un apuesto caballero llamado Juan. Agradecido, Juan le prometió a Ana cumplir cualquier deseo que tuviera.

FIN.

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