La princesa y sus amigos animales
Había una vez una princesa llamada Sofía, que vivía en un hermoso castillo. A Sofía le encantaban los animales, pero desafortunadamente, en el castillo no le permitían tener ninguno.
La princesa se sentía triste por no poder tener mascotas con las que jugar y compartir su tiempo. Un día, mientras paseaba por los jardines del castillo, conoció a un apuesto príncipe llamado Mateo. El príncipe Mateo notó la tristeza en los ojos de la princesa Sofía y decidió ayudarla.
-Hola, ¿por qué estás tan triste? - le preguntó el príncipe Mateo a la princesa Sofía. -Es que me encantan los animales, pero no puedo tener ninguno en el castillo. Me siento muy sola sin ellos- respondió la princesa con tristeza.
El príncipe Mateo sintió compasión por la princesa y decidió hacer algo al respecto. Entonces, ideó un plan especial para que Sofía pudiera tener amigos animales.
Con la ayuda de los criados del castillo, el príncipe construyó un gran y hermoso jardín lleno de árboles, arbustos y flores, donde los animales pudieran vivir felices. Luego, el príncipe Mateo trajo a todos los animales que encontró en el bosque: conejos, aves, mariposas, ciervos, y hasta un pequeño zorro.
Al ver ese maravilloso regalo, la princesa Sofía no pudo contener la emoción y comenzó a reír de alegría. -¡Oh, príncipe Mateo, es el mejor regalo que he recibido en toda mi vida! - exclamó la princesa Sofía, abrazando al príncipe con cariño.
A partir de ese día, la princesa Sofía pasaba todas sus tardes jugando y cuidando a sus amigos animales, quienes le brindaban amor y compañía. El castillo se llenó de risas, alboroto y alegría gracias a la presencia de los animales.
La princesa Sofía se sentía más feliz que nunca gracias a la generosidad y amistad del príncipe Mateo. Juntos, la princesa y el príncipe disfrutaban de la compañía de los animales y la felicidad inundó el castillo.
La historia de la princesa Sofía y sus amigos animales se convirtió en un ejemplo de amistad, compasión y felicidad para todos los habitantes del reino.