La Rosa Encantada
En un hermoso campo, vivía una niña llamada Sofía. Un día, mientras paseaba, descubrió una rosa muy bonita y brillante. Sin dudarlo, se acercó a ella y la tomó entre sus manos, maravillada por su belleza.
De repente, la rosa comenzó a brillar con una luz mágica y habló con voz suave: '-Hola, soy Rosalina, la rosa encantada. Tengo el poder de conceder deseos a aquellos que demuestren bondad y valentía.
¿Quieres hacerme compañía y cuidar de mí?' Sofía, sorprendida, aceptó encantada y prometió cuidar de la rosa con todo su amor. A partir de ese día, la rosa y Sofía se volvieron inseparables. Juntas vivieron emocionantes aventuras, ayudando a otros, superando obstáculos y aprendiendo valiosas lecciones.
A medida que demostraba su valentía y nobleza, Sofía descubrió que la verdadera magia estaba en ayudar a los demás y en el poder de la amistad.
Con el tiempo, la rosa le concedió a Sofía un deseo especial: convertirse en una niña bondadosa, que esparciera alegría y amor por doquier. Desde entonces, Sofía llevó consigo el espíritu de la rosa encantada, iluminando la vida de quienes la rodeaban con su bondad y generosidad.
FIN.